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¿Cómo combatir el resfrío y la congestión con remedios caseros?

La congestión nasal y el resfrío pueden afectar la calidad de vida. Aquí, remedios caseros para aliviar los síntomas.

Las variaciones de temperatura, el frío, el viento, el calor, la llegada del invierno e incluso la llegada del verano con el uso frecuente del aire acondicionado, suelen desencadenar una cosa común: resfríos y más resfríos. Aunque es posible prevenirlos, una vez que llega el malestar, a menudo solo queda intentar recuperarse lo más rápido posible. Sin embargo, más allá de la medicina tradicional, existen algunos remedios caseros que pueden ayudarte a sentirte mejor

Uno de los remedios clásicos y efectivos para sentirse mejor y aliviar el resfrío es la combinación de miel y limón. Podés optar por tomar una cucharadita de miel junto con el jugo de medio limón o mezclarlos con una infusión caliente. El líquido caliente aliviará síntomas como el dolor de garganta, te proporcionará una sensación reconfortante y descongestionará tu nariz. Además, el limón aporta vitamina C, y la miel es un antibiótico natural que te ayudará a combatir posibles infecciones. Si el resfrío ha obstruido completamente tu nariz, causando molestias, existe un remedio casero sencillo para aliviar este síntoma y mejorar tu respiración: el vapor. Herví agua en una olla y agregá algunas hojas de eucalipto. Cuando comience a hervir y suelte su aroma, retirá del fuego y con precaución acercate a la olla para inhalar los vapores. Para hacer este remedio casero aún más efectivo, podés cubrir tu cabeza con una toalla, lo que concentrará los vapores y mejorará su acción.

La miel, el limón y el jengibre pueden ser grandes aliados para realizar remedios caseros y combatir el resfrío.Por otro lado, si tu resfrío se caracteriza principalmente por malestar general, estornudos y un ligero dolor de cabeza, la miel con leche caliente también es un excelente remedio casero para aliviar tus síntomas. Sin embargo, esta opción solo se recomienda cuando no hay congestión nasal ni flema, ya que la leche a menudo puede aumentar la producción de moco. Por lo tanto, utilizá esta receta solo si no tenés flema. Cabe destacar que en caso de que los síntomas persistan, no debé automedicarte sino consultar con tu médico de confianza. Fuente: Aire Digital

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