En el Día del Médico, el presidente de la AMDC, Daniel Marfort, habló de la situación de los profesionales y llamó a la unidad para mejorar las condiciones de trabajo. También destacó con orgullo la actuación que tuvieron durante la pandemia.

Este viernes se celebra un Día del Médico, en un marco "especial" después de casi dos años de Pandemia, donde muchos de ellos dieron una interminable batalla. 
Es el caso del Dr. Daniel Marfort, quien estuvo trabajando con los más chiquitos y aconsejando a todos sus pacientes, en medio de tanto desconocimiento que tuvimos todos cuando comenzó a llegar el Covid-19 a nuestra ciudad. 
Marfort, quien a menudo es consultado por este medio, en diversos temas, se refirió en este caso a este día tan especial, donde dijo que "este año, por supuesto que hemos decidido conmemorar el Día del Médico, pero creemos que no es una fecha para festejar por múltiples razones. Sí queremos honrar a todos los colegas que han demostrado dedicación y compromiso en la lucha contra el Covid-19 y que aún se encuentran dando pelea en muchos frentes. Los médicos sabemos -y estamos orgullosos de ello- que hemos sido protagonistas en esta pandemia. Y no solo fue el trabajo que hizo el médico sino todo el equipo de Salud que ha sido reconocido por la sociedad en su conjunto, a pesar de que nos queda también un sabor amargo porque perdimos amigos, familiares, colegas.
Por otro lado, el reconocimiento recibido por esa extraordinaria muestra de servicio y vocación no fue suficiente para revertir la precarización laboral que sufre una parte importante de los colegas y que viene desde hace mucho tiempo", sostuvo al respecto.
-¿Cuál es la situación de los médicos en la actualidad?
-La actuación de los médicos durante la pandemia hizo emerger en la sociedad esa concepción altruista, científica y humanista que siempre caracterizó a la profesión y que, con justicia, le otorgó un lugar importante en la sociedad. 
Sin embargo, el ejercicio actual de la medicina ha derivado en un trabajo en el que el profesional perdió el control sobre la organización de su propia actividad, que se ha transformado en algo extraño, ajeno y hostil, tanto para él como para quienes requieren de su servicio. Eso fue provocado por la burocratización, la proletarización, la baja remuneración de un sistema que nos puso en segundo lugar cuando, en realidad, somos la llave del sistema de Salud y eso quedó demostrado durante la pandemia.
-Pero algunas cosas deben tener para celebrar este 3 de diciembre.
-Son pocas lamentablemente. Esos múltiples problemas que enfrenta el médico han puesto un peso extraordinario sobre su tarea, obligándolo a trabajar horas extras, reduciendo los tiempos de capacitación y llevándolo a perder su autonomía profesional. Quizás todas estas cosas no sean visibles para la gente, porque la mayoría de los colegas tiene una fuerte vocación de servicio que los impulsa a sostener esa impronta altruista y humana.
En la pandemia emergió esa condición porque cuando es necesario el médico antepone la vida a su propia seguridad. Hemos tenido colegas trabajando 20 horas seguidas, respondiendo mensajes a cualquier hora, yendo al domicilio de sus pacientes, privándose de ver a su familia, a veces por semanas. A esos colegas los aplaudimos porque representan la esencia de la profesión.

-¿Cómo se cambia esa situación?
-Toda esa extraordinaria tarea que vimos y el respaldo de la gente nos da esperanza. Si no pensáramos que es posible cambiar la realidad no hubiéramos asumido la responsabilidad de conducir los destinos de la Asociación Médica. Creemos que la forma de cambiar esa realidad es estando unidos. Y quiero poner mucho énfasis en esto último: la unidad.
Para nosotros sería más fácil quedarnos en casa, pero contra viento y marea queremos unir a los colegas para que empiecen a mejorar algunas cosas. Un grupo de 20 médicos puede hacer poco, por eso necesitamos que se involucren, que nos ayuden con ideas, con proyectos y que nos acompañen en aquello que emprendamos. Nuestro foco está en mejorar las cosas. Todas las decisiones que tomamos van en ese sentido, por eso a los colegas le pedimos tres cosas: apoyo y compromiso con la AMDC, paciencia y participación en la medida de sus posibilidades.
-¿Qué cosas debe cambiar la AMDC para lograr que los socios médicos se involucren?
-Lo primero creo es que el médico quiere transparencia en las decisiones que se toman. Ese valor será siempre nuestra bandera. También estamos convencidos de que es necesario devolverle a la institución el prestigio que siempre ha tenido. Queremos volver a ser actores relevantes en la vida social y cultural de nuestras comunidades, en las que los socios y socias médicos sean embajadores de nuestra institución. Sabemos que no será fácil pero estamos dispuestos a trabajar con ese objetivo.
Por otra parte, queremos trabajar fuertemente en la formación continua de los profesionales. La Asociación Médica no puede tampoco estar exenta de esa misión fundamental.
-Muchas cosas por hacer…
-Sí, sabemos que no será fácil por eso no podemos hacerlo solos. Y dejame que te sume otra que creemos que es fundamental: queremos fortalecer nuestro prepago gremial Centro Asistencial que es el prepago de todos los médicos. Un prepago fuerte es una fuente de trabajo de calidad para los socios médicos y también para colegas de otras profesiones hermanas y para los sanatorios. 
Antes mencionaba la burocratización del trabajo médico, Centro Asistencial es de los menos burocráticos para el médico, es el que más rápido les soluciona cualquier inconveniente, es el que el más rápido les paga… Porque estamos acá, nos conocen, conocen al personal, hay una cercanía que queremos fortalecer para que  progresivamente también podamos dar respuesta al mejoramiento de los aranceles, por eso necesitamos que los colegas sientan al prepago como propio y nos ayuden a hacerlo crecer.
-Hace poco que asumieron ¿En qué han podido avanzar hasta ahora en todos estos temas?
-Hace menos de dos meses que estamos al frente de la AMDC. Estamos en etapa de diagnóstico en muchas áreas pero sin embargo ya comenzamos con algunas acciones concretas. El primer objetivo es reunirnos personalmente con lo asociados para contarles cómo encontramos la institución y escucharlos; ya hemos realizado unas 5 reuniones en Rafaela y la región y todavía nos faltan.
Firmamos un primer convenio de vinculación con UCES y estamos dialogando para firmar otro con la UNRaf. La idea es establecer vínculos con múltiples sectores de la sociedad. Organizamos la primera capacitación con el aval del Colegio de Médicos que será este 4 de diciembre. Será la primera de muchas que pensamos brindarles a los asociados. 
Estamos gestionando convenios con otras instituciones para acercarles beneficios a los asociados que pronto informaremos. Todo ello mientras ordenamos y potenciamos la gestión de Obras Sociales y los proyectos institucionales como Centro Asistencial y Clínica Nacer.
-¿Una última reflexión para los colegas en este Día del Médico?
-A los colegas les decimos que pasen un excelente día y en nombre del grupo de Comisión Directiva les damos a todos las gracias por la tarea realizada en esta pandemia, por lo bien que nos han representado y, una vez más, les pedimos que nos acompañen para poder, desde el lugar que a cada uno le toque, devolverle a nuestra amada profesión el lugar que merece.