San Valentín de Roma se opuso a la orden del emperador Claudio II de prohibir la celebración de matrimonios para los jóvenes, por eso fue que comenzó a celebrar en secreto matrimonios para jóvenes enamorados. Al enterarse, el déspota sentenció a muerte a San Valentín, el 14 de febrero del año 270.
De igual manera, la primera vez que se celebró fue más de 200 años posteriores a ese hecho. Después de que el papa Gelasio I designara el 14 de febrero de 494 el primer día oficial de San Valentín, la festividad fue incluida en el calendario litúrgico tradicional y fue celebrada por la Iglesia católica en los siguientes 15 siglos.
Pero en 1969, bajo el pontificado de Pablo IV y después del Concilio Vaticano II, fue eliminado del calendario. Así pasó a ser una fecha con santo, pero sin celebración. Pero ya era tarde: el festejo había echado raíces en varias sociedades.
Ahora el Día de San Valentín también se denomina el Día del Amor, y en la jornada los agasajos se multiplican porque, además de los enamorados, lo celebran quienes tengan el espíritu festivo de conmemorar una relación que trasciende por el sentimiento fraternal y compartido entre los seres humanos.
En 1382, el escritor inglés, Geoffrey Chaucer, escribió un poema titulado "Parlamento de los pájaros", en el que se menciona por primera vez al Día de San Valentín como un día de festejo para los enamorados. A partir del poema de Chaucer, se comenzó a considerar el Día de San Valentín como un día dedicado al amor. Dieciocho años más tarde, el rey Carlos VI de Francia creó la Corte del Amor, mediante la cual, el primer domingo de cada mes y durante el Día de San Valentín, se efectuaban una serie de competiciones en las que los participantes luchaban para conseguir la atención entre las doncellas cortesanas. En 1416, el duque francés, Carlos de Orleans, tras haber sido capturado en la batalla de Azincourt y encerrado en la Torre de Londres, escribió una carta de San Valentín a su esposa Bonne de Armagnac. Esta carta es, en la actualidad, la carta de San Valentín más antigua conservada. A partir del siglo XV, la celebración del día de San Valentín como Día de los Enamorados, se fue popularizando en Francia y Gran Bretaña.
Con el paso del tiempo, esta festividad se fue poniendo de moda en otras partes de Europa como Alemania e Italia. También, a partir del siglo XV, se hizo costumbre escribir poemas o Valentinas entre enamorados. Desde principios del siglo XIX, comenzó en Gran Bretaña la comercialización de esta fiesta con la fabricación masiva de tarjetas de felicitación del Día de San Valentín, con frases hechas y adornos.
El sacerdote que desafió al emperador
San Valentín era un sacerdote que, hacia el siglo III, ejercía en Roma. Gobernaba el emperador Claudio II, quien decidió prohibir la celebración de matrimonios para los jóvenes, porque en su opinión los solteros sin familia eran mejores soldados, ya que tenían menos ataduras.
El sacerdote consideró que el decreto era injusto y desafió al emperador. Celebraba en secreto matrimonios (de ahí se ha popularizado que San Valentín sea el patrón de los enamorados). El emperador lo encarceló. Un oficial quiso ponerlo a prueba. Lo retó a que devolviese la vista a su hija Julia, que había nacido ciega. Valentín aceptó y le devolvió la vista.
Valentín siguió preso hasta que lo ejecutaron el 14 de febrero del año 270. La joven Julia, agradecida al santo, plantó un almendro de flores rosadas junto a su tumba. De ahí que el almendro sea símbolo de amor y amistad duraderos.
Pero lo de hacer regalos como flores o bombones en San Valentín es algo del siglo XX. En el siglo XX se convirtió en un gran negocio, cuando la revolución industrial permitió la producción en cadena de tarjetas de felicitación, uno de los regalos más frecuentes del día de San Valentín.
Los estadounidenses, por ejemplo, se gastan en tarjetas y otros detalles para ese día más de 18.900 millones de dólares, según la Federación Nacional de Comercio de EE.UU.
Comentarios