Por Alcides Calvo

Este momento que estamos atravesando nos hace reflexionar, dada la situación económica que atraviesa nuestro país, con un contexto en el que las fuentes de empleo están empezando a verse amenazadas y donde parece haber una falta de iniciativa por parte del Gobierno Nacional para impulsar el sector productivo. La combinación de un proceso inflacionario elevado y una severa recesión económica está poniendo en riesgo muchos puestos de trabajo.

El mercado laboral actual está en gran medida precarizado. Si realizamos un análisis profundo, resulta evidente la necesidad de políticas activas tanto a nivel nacional como provincial, que permitan la incorporación de personas de todas las edades y géneros bajo condiciones seguras y estables. Este es uno de los grandes desafíos pendientes en Argentina, y en un día tan significativo como hoy, deberíamos centrarnos en esta problemática.

Los trabajadores de Rafaela, y en realidad de toda la región, no sólo muestran un deseo ferviente de trabajar y una total identificación con sus empresas, sino que también demuestran una fuerte vocación. Es admirable ver cómo se identifican con las organizaciones que les brindan oportunidades.

Desde la Legislatura de la Provincia de Santa Fe, con el inicio de una nueva gestión democrática el pasado 10 de diciembre liderada por Maximiliano Pullaro, se ha intentado defender las fuentes laborales. Hemos afrontado una emergencia económica que abarcó no sólo la seguridad y el servicio penitenciario, sino también un aspecto social crucial. Este enfoque nos permite mantener una mirada atenta ante los cambios en la economía nacional que impactan directamente en las economías provinciales y en el empleo.

A pesar de que el presupuesto aprobado proviene de la gestión anterior, destaca por su fuerte apoyo al sector productivo y por mantener una estabilidad tributaria en Santa Fe por tercer año consecutivo. Esta estabilidad es vital, ya que ofrece a los empresarios, especialmente a las pequeñas y medianas empresas, una base desde la cual pueden no sólo mantener sino también potencialmente aumentar las fuentes de empleo, siempre que las políticas nacionales apoyen consecuentemente al sector productivo.

En este día tan especial, quiero enviar un cálido saludo a todas las mujeres y hombres que gozan de tener un empleo estable y formal. También extiendo mi reconocimiento a quienes, a pesar de estar capacitados, no han podido integrarse al mercado laboral debido a las circunstancias económicas y productivas actuales. Igualmente, un saludo afectuoso a quienes han formado parte de este mercado laboral y ahora disfrutan de su jubilación. Es un día para reflexionar sobre la importancia del trabajo digno y la necesidad de políticas que realmente protejan y fomenten el empleo en nuestra nación.