Los costos del transporte de cargas cerraron 2023 con doble récord: el 28,23% de aumento de diciembre fue el valor mensual más alto en los últimos 30 años, y el incremento acumulado anual trepó a 248%, el doble de lo registrado en 2022 (121%), que había sido la cifra más alta en 20 años.

El informe, realizado por el Departamento de Estudios Económicos y Costos de la FADEEAC, y auditado por la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires (UBA), mide 11 rubros que impactan directamente en los costos de las empresas de transporte de cargas de todo el país. Es referencia en buena medida para la fijación o ajuste de las tarifas del sector.

En un contexto de continuidad de alta inflación minorista y mayorista en la economía -que se prevé continúe en los próximos meses-, la maxidevaluación del tipo de cambio oficial tuvo un marcado impacto en los precios del combustible, principal costo del sector (acumuló en 2023 254% de aumento).

Por esa razón, el 15 de diciembre, la FADEEAC debió publicar un Índice de Costos preliminar, centrado especialmente en los aumentos del combustible en los segmentos minorista y mayorista durante las dos primeras semanas del mes, que reflejó un alza de 19,78% en los costos operativos sólo en ese período.

El incremento del 28,23% para diciembre incluye el 19,78% proyectado en la primera quincena. Desde la Federación se hizo hincapié en que como la fecha de cierre de los datos para elaborar el índice fue el 31, este trabajo no contempla los aumentos de combustibles que rigen a partir del 3 de enero de 2024.

Dos dígitos

Con los valores alcanzados, diciembre fue el mes con mayor incremento de 2023, año durante el que se registraron siete meses con aumentos de dos dígitos: febrero, 10,02%; mayo, 11,85%; agosto, 20,3%; septiembre, 11,1%; octubre, 10,12%; noviembre, 15,10%; y diciembre, 28,23%.

En diciembre, 8 de los 11 rubros que componen el índice, registraron importantes aumentos: lubricantes (70,4%); combustible (63,3%); seguros (39%); neumáticos (32%); gastos generales (29,7%); costo financiero (23,5%); reparaciones (17,2%); y material rodante (4,4%).

El delito es un verdadero problema

Si bien América Latina es una región que no cuenta con estadísticas consolidadas confiables o comparables en materia de delitos cometidos sobre los vehículos, existe una certeza de que todos los países muestran un sostenimiento o incremento de los robos de unidades, ya sea por el vehículo en sí mismo o como recurso para realizar otros hechos delictivos.

Al respecto, Martín Py, gerente de Alianzas Estratégicas de Strix by LoJack, Región Sur consideró que "dado que cada vez es más simple rastrear autos, camionetas o camiones, lo cierto es que los delincuentes pusieron su atención sobre los vehículos de flotas de empresas de alquiler".

"Obtener un vehículo alquilado, arrendado o financiado mediante robo, fraude o haciendo que otra persona lo alquile y no lo devuelva permite al delincuente ocultar su identidad y evitar que se le relacione con otros delitos que haya cometido", destacó.

En este contexto, Py sostuvo que "la gestión inteligente de flotas puede desempeñar un papel crucial en la lucha contra el crimen organizado y la delincuencia en varias formas, no sólo porque la capacidad de rastrear vehículos en tiempo real permite controlar la ubicación de vehículos en todo momento, sino también porque hoy es posible la implementación de geo vallados y alertas de desviación, a fin de establecer zonas geográficas específicas y recibir notificaciones instantáneas si el vehículo sale de su área designada".

Otra medida sería "implementar el corte automático del suministro de combustible hacia el motor, capaz de detener un vehículo ante el incumplimiento de una norma pre establecida o corte manual de parte del operador".