Por Alcides Castagno

Lo conocí en LT28, aparecía y se iba rápidamente, hablaba muy poco fuera de micrófono, se anunciaba su llegada con la cortina musical "Trasnochados Espineles" y comentaba sobre pesca y vida silvestre. Terminado su programa, partía con la celeridad con que había llegado y sus papeles debajo del brazo. Sin embargo, existía desde antes, había comenzado su actividad vocacional unos cuantos años atrás.

Antonio Jorge, originario de Pamplona y María Concepción García, de León, cabecera de la comunidad autónoma de Castilla y León, España, emigraron hacia Argentina y se establecieron en Hughes, en el extremo sur de la provincia de Santa Fe, con una panadería. Allí, el 15 de febrero de 1915, nació Baltasar Antonio; poco tiempo después nació Azucena, su hermana. Ambos desarrollaron desde jovencitos el gusto por la música. Un pianista de renombre, Juancito Díaz, interpretaba tangos y valses para que los adolescentes aprendieran a bailar. En el caso de Baltasar, la pasión por el tango fue creciendo con él, apoyada con una voz privilegiada.

Baltasar se casó con Luisa Gastaldi, ambos muy jóvenes. Tuvieron una hija, Marisa; cuando ésta tenía 9 años, su madre falleció y fue criada por los abuelos paternos. Se casó con Héctor Alberto Cuello, con quien tuvieron tres hijos: Gustavo, Mariano y Carlos.

Comunicador

Baltasar, ya apartado de su primera actividad en la panadería, había descubierto lo que después sería su medio de vida y crecimiento personal: el periodismo. Con una voluntad especial para superar escollos, comenzó publicando algunas informaciones como colaborador espontáneo del diario "El Orden", de Santa Fe. A continuación, LV2 Radio Central de Córdoba le dio un espacio para emitir su "Momento Rafaelino". Inquieto y audaz, convencido de su inclinación por la radiofonía, obtuvo un espacio en LW1 Radio Splendid (luego Universidad) de Córdoba y desde allí transmitió "Postales Serranas", "Morteros en el Dial" y "San Francisco en Marcha". Sus condiciones de animador se expresaron con éxito en las veladas de gala previas a las 500 Millas de Rafaela, transmitiendo en cadena con LT14 de Paraná, LT2 de Rosario y LR2 Radio Argentina. Se entusiasmó con la repercusión en el deporte y participó de transmisiones de fútbol, siguiendo la campaña de la Liga Rafaelina en el campeonato argentino. En una pausa con los micrófonos, realizó colaboraciones en medios gráficos como los diarios La Capital, La Prensa, El Ateneo y El Interior.

Bohemia

Casado en segundas nupcias con Hilda Foschi, tuvo dos hijos, Ricardo Alberto y Guillermo Luis. Nunca abandonó su andar por pueblos y ciudades buscando su medio de vida y de expresión. Pasaba largas jornadas en el Roberto Grau, plenas de naipes, rodeado de amigos, "con su mezcla milagrosa de sabihondos y suicidas", como él mismo cantaba en un imaginario cafetín. De pronto le surgía -por fuerza propia- algún viaje a Buenos Aires; en compañía fiel, frecuentaba un bar de San Telmo, "Los Pianitos" -hoy desaparecido- donde trasnochaba a puro canto dando rienda suelta a su pasión tanguera. Cuentan que la fama de su voz llegó al Colegio "Misericordia"; en ese momento, la Madre Superiora también tenía vocación por el canto y una voz maravillosa, así que lo invitó a Baltasar para formar un dúo en un acto de celebración escolar. Fue un verdadero suceso. En el mismo sentido, cuando ya militaba en el Círculo de la Prensa, organizaron junto a su amigo Antonio Terragni una cena-show que llamaron "Una Noche en el Maxim's de París", parodiando el exótico ambiente del restaurante francés más famoso de la época. Con el salón del Club Independiente decorado, abrieron la noche Baltasar y Antonio, cantando a capella por el salón, la "Canción del Linyera".

Radio en Rafaela

Cuando en 1970 se inauguró LT28 Radio Rafaela, se produjo una explosión vocacional, convocando a quienes tenían alguna experiencia en bailes, deportes y actos, más otros a puro entusiasmo y entre ellos apareció -no podía ser de otra manera- el aporte de Baltasar Antonio Jorge, "Bachín" para los íntimos.

En el aire regional se escucharon sucesivamente "Voces de mi Ciudad", "Informativo Ganadero" y "Camping 28". Según allegados de su tiempo, nunca le interesó demasiado la ganadería y tampoco la pesca, pero vio en esos temas un punto de atracción para cierta audiencia específica y se lanzó a difundirlos y explotarlos publicitariamente, transformándolos en clásicos regionales. Baltasar tenía un don especial para la seducción, lo que le permitía convencer a quien tuviera enfrente.

Merece un párrafo especial la actuación de Baltasar en el Círculo de la Prensa. Sus iniciativas, desde la comisión y luego la presidencia, lograron una firme presencia institucional, apoyado en Antonio Terragni y Renaldo Actis, entre otros.

Cuando advirtió que su entusiasmo decaía, se retiró de la actividad profesional, aunque no de la frecuencia de amigos y los naipes del Grau, hasta que, con 81 años cumplidos, dejó la vida y el canto para quienes quieran recordarlo.

Vaya un agradecimiento especial a Cuqui Schuren, Marisa Jorge y Gustavo Cuello, por sus aportes para esta historia.