El secretario general del Centro de Empleados de Comercio de Rafaela, Juan Berca, alerta sobre la difícil situación que enfrentan los trabajadores del sector en medio de un contexto económico complicado. Preocupado por la caída del poder adquisitivo, los bajos ingresos de la obra social y la necesidad de modernizar la legislación laboral, destaca la importancia del sindicato para defender los derechos laborales.
En una entrevista con el secretario general del Centro de Empleados de Comercio de Rafaela, Juan Berca, se analizaron las condiciones actuales del gremio y los desafíos que enfrentan los trabajadores del sector. Con un panorama preocupante debido a los ataques hacia las instituciones sindicales y las obras sociales, Berca subrayó la importancia de la organización sindical en la defensa de los derechos laborales y el respaldo que ofrecen a sus afiliados.
Preocupación por el ataque a las instituciones sindicales y el futuro de la obra social
"La situación del sindicato hoy es preocupante, principalmente por los constantes ataques que se realizan hacia la Institución Sindical y su Obra Social", expresó Berca, refiriéndose a la difícil coyuntura que atraviesan los gremios en general. "Cuando se establecen políticas liberales o libertarias, como les gusta llamarlas ahora, se producen muchas desigualdades en los distintos sectores. En este ambiente, los sindicatos, al igual que toda institución que fomente la lucha por la igualdad, la ayuda mutua y la solidaridad, molestan".
El dirigente señaló que el Centro de Empleados de Comercio no sólo actúa en materia laboral, sino que también brinda múltiples servicios de salud, asesoramiento, esparcimiento y actividad social. "Sería un contrasentido hacer desaparecer todo esto. Hoy, el trabajador tiene un respaldo en su discusión salarial y en sus condiciones laborales a través del sindicato y todo lo que representan los convenios colectivos de trabajo. Sin eso, dejaríamos todo a merced de las partes", advirtió.
En relación con la obra social, Berca remarcó el impacto del desfinanciamiento debido a la disparidad entre los ingresos en pesos y los costos en dólares: "Si no hay una política que mejore el sistema de obras sociales, van a quebrar en poco tiempo. Una empresa de medicina privada cobra entre $ 200.000 y $ 300.000 por persona para dar cobertura y se quejan de que es poco. A nuestra obra social ingresan $ 78.000 por grupo familiar, y si a eso le anexamos que un monotributista aporta $ 13.000, nos damos cuenta lo mal que estamos".
Caída del consumo y modernización laboral: los grandes desafíos
Entre las principales problemáticas que enfrentan los trabajadores mercantiles, Berca mencionó la caída de ventas producto de la pérdida de poder adquisitivo. "Se está haciendo un esfuerzo grande para mantener los puestos de trabajo. Aunque muchos caen en la trampa de creer que el problema del empleo en la Argentina es por el alto costo laboral, nosotros decimos que la presión impositiva gravita enormemente en el desarrollo de cualquier actividad".
Además, destacó la necesidad de modernizar la legislación laboral para adaptarse a las nuevas formas de trabajo, como el home office, las ventas online, y las empresas que operan mediante aplicaciones y delivery. "Debemos contemplar estas nuevas formas laborales en la legislación para que los derechos de los trabajadores estén garantizados en todos los ámbitos", afirmó.
Sueldos y despidos: el panorama actual
Respecto a la evolución salarial en 2024, Berca indicó que, aunque se acordó un incremento del 15% para abril y mayo, seguido de un 13,5% distribuido entre junio y agosto, la inflación ha erosionado significativamente el poder adquisitivo. "El Gobierno ya advirtió que no va a homologar aumentos superiores al 2%, y aventuró que lo ideal sería que hasta fin de año no haya más incrementos de sueldos. A pesar de esto, seguiremos insistiendo con la actualización salarial".
El salario inicial ronda los $ 880.000 brutos, mientras que la canasta básica para una familia tipo en septiembre marcó $ 946.000, sin incluir alquileres. "Esto muestra que, con un sólo sueldo, una familia no alcanza a cubrir los gastos básicos", lamentó el Secretario.
En cuanto a los despidos, Berca explicó que el número de empleados de comercio se ha mantenido estable entre 5.500 y 6.000 trabajadores en los últimos diez años. Sin embargo, alertó sobre el crecimiento del empleo informal: "Lo que vemos es mucha cantidad de empleos en negro".
Desafíos para el último trimestre y un mensaje a los trabajadores
De cara a los últimos meses del año, el principal desafío del Centro de Empleados de Comercio es mantener e incrementar los beneficios para sus asociados. "Debemos demostrar la importancia de la institución gremial y trabajar en la concientización de los trabajadores para que no bajen los brazos en la defensa de los sindicatos como herramienta para conseguir un salario y trabajo digno", enfatizó.
Finalmente, en el marco del "Día del Empleado de Comercio", Juan Berca envió un afectuoso saludo a todos los trabajadores del sector, activos y jubilados. "Nuestro compromiso es seguir en la lucha por engrandecer esta institución. Agradecemos y rendimos homenaje a aquellos pioneros que en 1909 la crearon y que, desde entonces, no ha parado de crecer. Seguramente, seguirán llegando trabajadores que, con solidaridad, lealtad y compañerismo, profundizarán este crecimiento", concluyó.
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