A partir del 10 de diciembre, el socialista Esteban Paulón será uno de los diez diputados que representarán a la Provincia de Santa Fe en el Congreso Nacional. Formará parte del bloque Socialista junto a Mónica Fein e integrará el interbloque Federal que componen también los diputados "schiarettistas" de Córdoba y "randacistas" (Florencio Randazzo). Serán 8 (se puede sumar alguno más) los legisladores cuyas fuerzas vienen trabajando coordinadamente desde hace tiempo. En diálogo con Diario CASTELLANOS, Paulón resaltó el crecimiento que tuvo la fuerza desde las PASO de agosto a las Generales de octubre. Analizó "el Congreso que se viene" y dejó en claro su postura frente al balotaje del 19 de noviembre.

El Socialismo acompañó con la Fuerza de Santa Fe la propuesta de Juan Schiaretti como candidato a Presidente. "Hacemos por Nuestro País", a nivel nacional obtuvo 1,78 millones de votos (6,78%) en las Elecciones Generales del domingo pasado. Prácticamente duplicó lo realizado en las primarias del 13 de agosto: 907.437 (3,71%). En Santa Fe, el crecimiento fue aún superior: casi triplicó los votos entre una y otra Elección: pasó de 67.563 (3,67%) a 183.205 sufragios (9,04%). Estos números permitieron que Paulón pueda ingresar a la Cámara de Diputados cuyo crecimiento fue prácticamente en espejo con el mandatario cordobés (3,37% a 9,22%). Y algo más que analiza en la nota con este medio: en el Departamento Castellanos, Schiaretti -y casi paralelamente Paulón- pasaron de 8,39% a 14,77% de los votos entre ambas Elecciones. En nuestra región, casi duplicaron la media nacional.

-¿Lo sorprendió los resultados en el interior de la Provincia, como por ejemplo en nuestro Departamento?

- Entiendo que se dieron por el contenido del discurso de Schiaretti vinculado a la producción, al trabajo, al campo. Cinco visitas hizo a la provincia, una de ellas a Rafaela y Sunchales donde estuvo presente, conoció su trama industrial, agropecuaria, dialogó con sus actores.

Los debates fueron clave

"Veníamos de unas PASO donde la votación se concentró en tres candidaturas con la sorpresa del triunfo de Javier Milei en la mayoría de las provincias argentinas, incluida la nuestra" recuerda Paulón. "LLA", "UP" y "JxC" obtuvieron cerca del 90% de la votación. "De todos modos, habíamos dicho que a partir de la general comenzaba otra campaña. Habíamos marcado el tema de los debates como un punto importante. Esos momentos son los únicos en los que la gente tiene una plena atención en el proceso electoral. Muchos estaban pendientes de escuchar cuáles eran las propuestas de los candidatos (NR: el rating fue de 40 puntos). Los cinco candidatos tenían el mismo tiempo, la misma atención pública y la misma posibilidad de expresar sus ideas. Teníamos la certeza de que nuestro candidato iba a hacer un excelente papel porque es una persona con mucha experiencia política, con contenido, con propuestas claras. En el primer debate se popularizó, entró en la agenda pública. Empezó a aparecer, al principio, como consumo irónico, ¿no?, con los memes 70-30 del Fernet, etc. Y en el segundo debate, con propuestas muy claras, con acciones concretas y precisas. Una buena parte de la población vio en él un estadista y a una persona que tenía claro hacia dónde quería llevar al país. Será tema de análisis de la Ciencia Política. Antes decían que un debate podía modificar el 1% y la verdad que tuvieron un impacto muy grande para todos los candidatos. Y el que más se benefició fue Juan Schiaretti", describió. Otra cuestión que resaltó Paulón fue que, al finalizar la contienda electoral provincial, (recordamos que por decisión del gobernador Omar Perotti se intercalaron ambos procesos) "desde el Partido Socialista, ya resuelta esa elección, teníamos más herramientas para salir a hacer campaña sin tanta confusión. A nivel provincial participamos en un espacio que incluye sectores que a nivel nacional están con Juntos por el Cambio. Estos fueron los dos factores que permitieron, sobre todo en los últimos 20 días de campaña crecer muchísimo. La verdad que se movió mucho, tanto la candidatura de Schiaretti como el Partido Socialista que tiene claramente en Santa Fe un desarrollo territorial muy importante y eso lo marca que después de Córdoba fue la provincia con mejor resultado electoral".

- Y llegaron las resultados de las Generales. ¿Cuál es su análisis?

- El pueblo demostró que los votos no son de nadie. Uno tiene que buscar el apoyo en cada momento y tiene que lograr llegar con sus propuestas. El candidato que había salido tercero en las PASO, termina ganando por seis puntos. Milei queda estancado y Patricia Bullrich se cae. Irrumpe una cuarta fuerza con una dinámica de crecimiento. En 2019, nosotros acompañamos a Roberto Lavagna que en las PASO le va muy bien y en la GENERAL, por lo que se llama el voto útil, cayó mucho. En cambio acá aparecieron un millón de votantes nuevos de Schiaretti. Hay que ser muy cautos y responsables con el sentido del voto del 22 de octubre. Claramente está expresando una necesidad de cambio en el sentido de que hay cosas que en el país no van más: la inflación. el abandono a las provincias desde los sucesivos gobiernos nacionales, la discrecionalidad en la distribución de los fondos, el deterioro de la Educación y de la Salud Pública, la ineficiencia de muchas áreas del Estado. Creo que ese es un mensaje claro incluso en muchos votantes del propio Sergio Massa. Lo que sí también nos dijo la sociedad es que ese cambio no se puede hacer con motosierra y dinamita: no se puede apelar a que todo estalle por el aire para ganar una Elección o para provocar un cambio profundo. Hubo una reflexión muy interesante de buena parte de la ciudadanía: ese cambio, a 40 años de Democracia, tiene que hacerse en el marco de las instituciones democráticas y de los consensos democráticos. El programa de Milei era violento, anulaba al que piensa diferente, recortaba todo. La gente decidió: el país así no puede seguir, pero no puede ir a una explosión y por eso creo que le quitó un poquito el pie del acelerador a ese fenómeno que venía creciendo y decidió elegir otras opciones, incluida la nuestra.

-¿Cómo analiza este acuerdo que hubo a nivel nacional entre Bullrich, Macri y Milei?

-El 22 de octubre el resultado cristalizó algo que al menos en los círculos políticos se percibía: la fractura de la principal coalición opositora. Evidentemente las PASO de Juntos por el Cambio fue muy dura, con mucha descalificación personal. Se llegó a un punto del debate imposible de volver atrás. Incluso ante los forzados gestos de unidad, como ofrecerle a Rodríguez Larreta la jefatura de Gabinete por parte de Patricia Bullrich, estaba claro que ese espacio ya estaba roto. Y la aceleración la pegó Macri sobre todo, apoyando al candidato que siempre fue el suyo. En campaña no se cansó de denigrar a su propia candidata,

hablando maravillas de las propuestas de Milei. Apuraron esa decisión. Eso mostró una fractura que hace que también a partir del 10 de diciembre el Congreso presente un panorama muy distinto al que se supone que arrojaron los resultados. Empiezan las divisiones y filtraciones en todos los espacios políticos. Esto se sigue reacomodando.

-Mientras, nos acercamos al 19 de noviembre, ¿Cuál será la postura del Socialismo?

-Lamentablemente hasta ahora las dos principales fuerzas ven el 19 de noviembre como una Elección en la cual se asemeja a completar las figuritas del Mundial de Fútbol: cada uno está viendo qué foto se saca, qué gesto hace, a quién suma para completar ese álbum. La gente ya demostró que no hay ninguna Elección cerrada en Argentina. Lo que a priori parecería una cuestión positiva y un espaldarazo para Milei (el apoyo de Macri y Bullrich), termina haciendo estallar el frente opositor y no es claro en qué medida eso termina beneficiando a Milei porque contradice su discurso anticasta y genera decepción en las personas que lo habían apoyado. Cuando no tenés un programa y un rumbo claro, esas sumas te pueden servir para ganar una elección como cuando Cristina convoca a Alberto y a Massa. Una vez llegado al Gobierno sin mecanismos de toma de decisiones, eso se desvanece en el aire y es este fracaso que vemos ahora.

El Partido Socialista (en los próximos días vamos a tener nuestras instancias orgánicas como corresponde), sigue siendo un partido político y no una mesa de café de tres dirigentes. Se reunirá el Comité Ejecutivo Nacional como indica la carta orgánica para definir qué hacer de cara al balotaje. Una opinión personal es que obviamente con Milei no tengo nada que ver. Nos llamó excremento humano, no creo que quiera juntarse con nosotros. No hay ningún acuerdo programático: él es negacionista de la Memoria, la Verdad y la Justicia, misógino, homofóbico, niega el cambio climático, ve conspiraciones en todas las agendas de los organismos internacionales y de Derechos Humanos. No tenemos nada que ver con Milei. Pero también es un error que Sergio Massa piense que la sociedad le dio un cheque en blanco. Debe existir un rumbo hacia dónde va el país. Cuando hacés una propuesta que sólo busca un triunfo electoral y no tiene un programa ni tiene contenido, hoy quizá le ganes a Milei. Pero si volvés a fracasar en unos meses vas a tener a otro "Milei". El desafío es construir con amplitud y nosotros desde el socialismo vemos con mucha angustia y preocupación esta situación.

Nos toca ir al Parlamento a acompañar los proyectos que sean positivos para el país y que defiendan a nuestra provincia. A marcar todo lo que creamos que no corresponde. Haremos un rol de oposición responsable. No formamos parte de ninguno de los dos espacios que contienden el 19 de noviembre, pero creemos también que es muy difícil plantearse prescindente ante un escenario donde se están jugando los fundamentos mismos de la joven democracia que venimos reconstruyendo desde 1983.

El Congreso que se viene

Ante la consulta de cuál es el Congreso que vislumbra donde no se avizoran "mayorías automáticas" (gane quien gane), lo que obliga a buscar consensos y debates, Paulón describió: "Se viene un Congreso con mucha actividad. Preveo que el Presidente que asuma convocará a extraordinarias todo el verano para poder trabajar en leyes y reformas que serán parte de su programa". A esto agregó "muchos de los que plantearon en campaña algunas de las ideas más insólitas y delirantes de los proyectos de ley han sido electos diputados y diputadas, serán colegas. Así que vamos a estar también no sólo discutiendo cuestiones de lo macro a nivel nacional, sino algunas cuestiones que tienen que ver con los valores que nos tocará defender".