Por Martín Lehmann
Darío Céspedes era profesor de música en el Jardín de Infantes "San Roque" de la ciudad de Santa Fe. En 2019 la madre de un menor lo denunció por abuso sexual y tras el juicio fue condenado a 11 años de prisión. Actualmente está cumpliendo la pena en la Unidad Penitenciaria nro. 10, en el norte de la provincia.
Allí, en su lugar de encierro, brindó una entrevista a Diario CASTELLANOS en la que aseguró ser inocente y explicó las razones por las que fue injustamente condenado, dando detalles del proceso judicial que hasta ahora no habían salido a la luz.
Atribuyó el desenlace del juicio a presiones mediáticas e institucionales que fueron determinantes para el fallo de los jueces: "No me condenaron porque hay pruebas. Me condenaron porque quizás podría haberlo hecho. Ya lo habían hecho los medios. Entonces la sentencia estaba previa y me tenían que condenar".
La causa de Céspedes se puede dividir en dos etapas. La del año 2018, mientras él daba clases de música al menor en el jardín de infantes y la de 2019 ocurrida en la escuela primaria, en la que el profesor no trabajaba, pero igual se lo involucró.
Cómo ocurrió todo
Para entender la cronología vamos por partes:
En 2018 la madre del menor lo hace atender por un pediatra luego de haber percibido lesiones. El pediatra lo revisa y en la historia clínica consigna "descartar abuso", al estimar que todo podría deberse a la constipación crónica del niño. Igual sugiere que ella esté atenta a los diferentes entornos en los que se movía el chico. Días después Céspedes es acusado informalmente por la madre a través de un grupo de WhatsApp de haber abusado de su hijo. Con el pasar de los días no se radica ninguna denuncia formal en la Fiscalía, finaliza el año lectivo y el menor es inscripto para primer grado en el mismo complejo educativo.
En 2019 transcurre la mitad del año sin novedades, hasta que en el mes de julio la misma madre vuelve a acusar al profesor de música de abusar de su hijo. Esta vez lo hace con una denuncia formal a pesar de que Céspedes ya no era docente de su hijo ni trabajaba en ese edificio. Ella dijo que el condenado cruzaba la calle que separa el jardín de la primaria, ingresaba sin ser visto por nadie y se llevaba al niño para someterlo.
En febrero de 2020 la Policía detiene en su casa al profesor y, desde ese día, estuvo en prisión preventiva hasta la sentencia.
En julio de 2022 se realiza el juicio que finaliza con el fallo del tribunal compuesto por el juez Gustavo Urdiales, los Dres. Rosana Carrara y Pablo Ruiz Staiger. El mismo le impuso una pena de 11 años de prisión al hacerlo responsable de los abusos de 2018, pero absolviéndolo de los presuntos hechos de 2019 por el beneficio de la duda, ya que no habían arribado a la certeza necesaria para condenarlo.
Un fallo en potencial
Justamente una de las principales críticas que desde la cárcel hace Céspedes, es que se lo condenó con un fallo escrito en potencial. Es decir, sin certeza de lo que se explicita: "Lo más ilógico es que se haga un fallo en potencial porque respecto al 2018 nunca hubo determinación de los hechos. En la acusación y en las audiencias nunca se determinó cómo habrían sucedido los hechos. No se aclaró cómo, cuándo, dónde y qué pasó. No se dijo si era en el baño, en el aula o en el patio. No se dijo en qué momento, si era durante la clase de música o durante el recreo, aunque en el jardín no existen los recreos. No había una determinación de la situación y lo que había pasado".
Luego agregó que se tomaron como válidas para el tramo del 2018, las pruebas que correspondían al 2019: "El chico dice que fue en primer grado, la madre la historia más fuerte la hace en relación a la primaria, pero como no había una acusación armada sobre cómo y qué es lo que podría haber pasado, la acusación la arma él (Urdiales). Entonces hace un fallo en potencial con las palabras 'habría' y 'podría'. Por ejemplo dice: Podría haber aprovechado que la maestra saliera, y las maestras podrían haber olvidado que el docente aprovechó un momento de descuido".
Apelación y próximos pasos
A finales de 2022 la Defensa de Céspedes apeló el fallo pidiendo su absolución pero lo único que consideró el tribunal fue una reducción de la pena por discrepancias con la Fiscalía en la calificación del delito. Así entonces le redujeron la pena de 11 a 9 años de encierro.
Durante los primeros meses de este año, la Defensa presentó un recurso de inconstitucionalidad que fue rechazado. En este momento la última información que se conoce es que se estaría preparando un pedido de revisión de condena.
La causa en un documental
El reportaje completo a Darío Céspedes puede verse en el recientemente estrenado documental "El caso Céspedes" realizado por la productora In dubio, especializada en cine judicial. Se encuentra disponible en la plataforma YouTube buscándolo con esa denominación. El largometraje tiene una duración de 58 minutos y hace un repaso pormenorizado de lo acontecido durante el proceso, mediante la voz del condenado, de su familia y de profesionales que aportan su mirada experta en el área.
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