Por Sebastián Pintos
Como lo venimos relatando continuamente, la ciudad ha acelerado su proceso para sumar suelo productivo y durante la víspera se desarrolló un importante encuentro de trabajo entre distintos representantes del Centro Comercial, sus cámaras de profesionales, miembros del Concejo y del Ejecutivo local, donde se abordó la posibilidad de trabajar en la habilitación de aquellos sectores que no necesitan de grandes intervenciones para su uso, mientras que a la par se continúe avanzando en los lineamientos generales para todo este gran sector que abarca un total de 1.200 hectáreas.
Luego de este encuentro, desde Diario CASTELLANOS, dialogamos con Iván Acosta, director General del Centro Comercial e Industrial de Rafaela y la Región, quien admitió su coincidencia con la mirada del Ejecutivo en avanzar con algunas áreas específicas que permitirán habilitar unas 170 hectáreas para suelo productivo, ya que las mimas no requerirán de obras de infraestructura para que sean viables desde el punto de vista hídrico, con lo cual la propuesta que surgió en el encuentro fue poder tratar el artículo Nº 3 de esta ordenanza marco, priorizando ahora ese tratamiento así separarlo, de los artículos Nº 1 y 2, ya que en estos se plantean los lineamientos generales de la ordenanza territorial y sobre todo de la sectorización hídrica del plan urbano rural del sector noroeste de la ciudad.
Como lo detalló Acosta, las generalidades y los lineamientos macro de este proyecto buscarán que puedan ser tratadas más adelantes ya que "por más que sean generalidades y después haya que tratar ordenanzas para cada uno de los sectores en particular, entendemos que resulta necesario profundizar los espacios de diálogo con todos los actores involucrados y potencialmente alcanzados para que se dé un debate público-privado bien amplio en torno. Además, más allá de los primeros 170 hectáreas, el resto de las zonas no tendría posibilidad de desarrollo en la medida que nos hagan las obras que hacen falta. En términos generales, sí puede haber convenio urbanístico para desarrollar algunos proyectos particulares, como va a ser el caso de Rafaela Alimento, pero no se van a poder desarrollar en tanto no se encaren las obras como la canalización del Bajo Copagnucci o el mejoramiento integral del Canal Oeste. Con lo cual, tenemos tiempo todavía para debatirlo y analizarlo".
En esta misma línea, el Director General del CCIRR sostuvo que esa discusión no debe porqué demorar el análisis de lo que "está con posibilidades reales de desarrollo más rápido. Entonces, por eso proponemos dividir esas dos cuestiones. De todas maneras, nosotros reiteramos los planteos que venimos haciendo hace tiempo. Necesitamos diseñar una estrategia, un plan de trabajo entre todos, aunando esfuerzos, para que gestionemos de manera conjunta las obras que hacen falta".
Es importante aclarar que dentro de estas 170 hectáreas, 100 podrán ser utilizadas luego de las intervenciones que se vienen realizando en el acceso oeste a Rafaela entre la Variante y el Cementerio local. Por otro lado, también hay un sector al norte sobre la Ruta 34 en su traza actual que son alrededor de 50 hectáreas. Finalmente se suman otras 22 hectáreas a partir del convenio con Rafaela Alimentos que también están aptos. En total, son más de 170 hectáreas que están disponibles para su aprovechamiento en desarrollo productivo, de ahí la necesidad de acelerar los tiempos del tratamiento del proyecto.
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