Por Sebastián Pintos

Días atrás, dirigentes empresarios e industriales de nuestra ciudad se reunieron en el Centro Comercial e Industrial de Rafaela y la Región para poder analizar el panorama complejo que les toca transitar, con una verdadera encrucijada y con variables económicas que golpean por todos lados a los sectores productivos, con suba de impuestos y retenciones, aumento en insumos y materia prima, inestabilidad en el tipo de cambio, las constantes trabas para los importadores. Todos estos aspectos que vienen azotando a la economía argentina en el último año y que la llegada de un nuevo Gobierno, no otorga la previsión o estabilidad deseada para continuar con los procesos productivos sin tener que estar alertas en todo momento.

Particularmente Edmundo López, máximo responsable de la Cámara de Comercio Exterior de Rafaela, reconoció a CASTELLANOS que el país y los funcionarios nacionales deben actuar inmediatamente para llevar adelante correcciones en materia de importaciones ya que de continuar por este camino, se verá perjudicada la continuidad de la producción por falta de insumos claves.

Obviamente que esta situación no afecta a todos por igual y que la capacidad de unos no es la misma que otros, pero ante esta situación, el dirigente reconoció que muchas empresas cuentan con stock de insumos para los próximos 30-60 o 90 días, si bien parece un tiempo más que importante para sostener la actividad diaria, el dirigente explicó que esos 90 días son los necesarios para que una empresa pueda comprar insumos en el exterior, le preparen el pedido y que el mismo pueda llegar al país. Todo este proceso demora entre 60 a 90 días, con lo cual los plazos para las correcciones están al límite.

Cabe aclarar que actualmente el país cuenta con una deuda comercial por importaciones que supera los USD 21.000 millones, cuya deuda se divide en tres sectores: USD 16.500 millones correspondiente a grandes empresas; USD 2.500 millones a medianas empresas y USD 2.000 millones a pequeñas y micro empresas. Desde Nación garantizaron que buscan ordenar el flujo de comercio exterior del país sin desatender los problemas de stock que a la fecha son las grandes incógnitas que surgen, pero en paralelo conocer realmente el nivel de deuda comercial alcanzado por personas y empresas que en los últimos meses hayan importado insumos fundamentales para la producción.

En este sentido, el dirigente empresario y responsable de la Cámara de Comercio Exterior de Rafaela, Edmundo López, admitió que "para importar hay que pagar con un plazo determinado, como decía recién, no podemos pagar lo anterior, entonces como que hay una traba a esta situación. Se están estudiando distintas alternativas como puede ser afrontar los pagos por fuera del mercado de cambio que significa acceder a un dólar en el exterior, con distintos mecanismos que deben ser legales pero que incrementan los costos en un 25-30%, entonces es imposible de soportar. Hay distintas empresas en diferentes situaciones, pero en promedio te diría que las empresas cuentan con tres o cuatro meses de insumo, cuando una importación normal demora alrededor de 90 días. Con lo cual la resolución debe ser en lo inmediato porque en tres meses más hay empresas que van a tener que parar su producción por esta situación", reconoció.

De igual forma el dirigente admitió que se deberán buscar diversas alternativas para que las pequeñas y medianas empresas puedan garantizar el pago de deuda que no sea a través del bono (BOPREAL) ya que no resultan adecuadas para este tipo de organizaciones, apuntando a encontrar mecanismos especiales para estos segmentos.

Por otro lado, en materia de exportaciones, López fue realmente crítico al reconocer que actualmente argentina está castigando a quienes producen y venden al extranjero, ya que los impuestos percibidos no hacen más que devorarse la capacidad de generar beneficios. En este sentido, todos los empresarios que participaron del encuentro en el CCIRR fueron contundentes al reconocer que Argentina debe generar una "inserción inteligente en el mundo" y que el comercio internacional debe ser un pilar fundamental para su recuperación económica y no sólo un sector más del cual aprovecharse con impuestos y retenciones como se han visto en el último tiempo.

Políticas para revalorizar a todo el sector privado

Más allá de todos los planteos necesarios para corregir la macroeconomía, aspectos que se han planteado en incontable cantidad de veces, entre ellos la restricción externa, brecha cambiaria, elevada inflación, desequilibrio fiscal e incremento de impuestos o retenciones que no hacen más que poner trabas para el desarrollo productivo.

Justamente este fue una de las coincidencias a las cuales llegaron los empresarios de nuestra ciudad en su encuentro, donde reconocen que debe haber un cambio de paradigma para poder apuntalar el desarrollo de los sectores productivos y que no sólo alcanza con "incentivos" o "programas" para el sector, sino de inversión productiva, generación de empleo privado, un sistema tributario equitativa, previsible y progresivo junto al diseño de un Estado más eficiente, con menor burocratización y más transparencia.

En diálogo con Diario CASTELLANOS, el director General del CCIRR, Iván Acosta reconoció que la expectativa del empresariado para el mediano plazo es la corrección de estas variables y que "es la clave para después pensar en una política de desarrollo industrial". En síntesis, una no es posible sin lo otro, por eso mismo, admitió que es imposible aplicar algún tipo de promoción industrial, de incentivos específicos o políticas más concretas, si es que antes no se produce un ordenamiento macro de estabilidad fiscal, que se pueda controlar la inflación y sobre todo lograr mejores tasas.

"La expectativa como te digo, es que eso se ordene y se ordene en un lapso de tiempo que sea prudente, racional, porque en la medida en que, como te decía al inicio, si persisten muchas de las distorsiones que se fueron acumulando a lo largo del año pasado el futuro no es alentador". En esta misma línea Acosta sumó todo lo que ya venía del pasado y una situación que se viene dando en el presente con caída en los niveles de producción, retracción en el consumo junto con los aumentos considerables de precios, que si persisten y no se corrigen a tiempo pueden ser combos letales para la economía argentina.

Acosta fue prudente al reconocer que hoy no se percibe una "situación finalizada" o corregida, sino que todo lo contrario, la gran mayoría de las empresas de la provincia y también de la ciudad están con niveles bajos de actividad en comparación a lo sucedido en el 2023, e incluso esto es reconocido por el último informe elaborado por FISFE donde sentenció que en los primeros 11 meses del 2023, la actividad industrial se retrajo más de un 8% en comparación con el 2022.

El dirigente del CCIRR reconoció que muchas empresas han tomado los recaudos necesarios para poder afrontar esta situación, y que más allá de la espalda propia de los empresarios de la ciudad, desde la institución garantizaron que acompañarán a sus afiliados en la medida de las posibilidades para poder sostener el nivel de producción, el empleo y sobre todo esos puestos de trabajo tan importantes.