Por Gustavo Borletto
Albert Spaggiari nació en Francia en 1932 y fue tal vez, el malhechor más perseguido de la historia policial francesa. Su célebre y principal delito: el robo al Banco de la Societé Generale de la ciudad de Niza (1976). De ascendencia italiana, y muerto su padre cuando tenía 3 años, su madre rehace su vida en la ciudad de Hyeres, donde lleva adelante una tienda de lencería.
La idea le viene luego de leer la novela de Robert Pollock ("Todos a los desagües"-Tous á l'égout). Un amigo conocedor de la ciudad y que ha sido empleado del Banco, le cuenta que hay unos desagües que pasan por debajo y que la bóveda de seguridad no tiene alarma alguna porque está protegida por 1,80 m de cemento concreto.
Más de dos años de preparación para el gran golpe van a comenzar: Albert alquila una caja de seguridad y coloca un reloj despertador para que suene en la noche para efectuar una prueba de la ausencia de alarmas sísmicas o sonoras.
Después de meses inspeccionando los desagües se convence de que es posible el acceso a la bóveda y comienza a formar un grupo para llevarlo a cabo.
Tres meses de ardúo trabajo por las noches, 15 personas silenciosas y discretas, muchas herramientas pesadas y mucha tierra y barro para remover: efectúan un túnel de 8 metros de largo para llegar hasta la pared del Banco. Ahora hay que instalar electricidad y perforar casi 2 metros de concreto.
Los terribles trabajos de fuerza y de perforación deben detenerse durante tres días porque el 9 de julio de 1976, el presidente de la República Francesa, Valéry Giscard D'Estaing, visita la ciudad y el operativo de seguridad es muy grande para correr riesgos.
Exhaustos y casi a punto de abandonar, se dan cuenta que ya llegaron a centímetros de penetrar en la bóveda. Albert Spaggiari decide entonces que en la noche del viernes 16 de julio van a entrar y a permanecer todo ese fin de semana dentro del Banco. Entran con grandes sopletes industriales, tubos de acetileno, barretas y perforadoras mineras.
En 2 días y 3 noches llegan a abrir sólo 371 cajas de seguridad de las 4000 existentes (resultaron mucho más resistentes que lo que habían estimado). Pueden juntar 50 millones de francos (unos 40 millones de euros de hoy en día) más algunos lingotes de oro también.
Cuenta la leyenda que Albert Spaggiari les lleva a sus hombres algunas botellas de vino y paté para festejar el hecho. También que dejaron colgadas por doquier, unas fotos de desnudos de personas conocidas de la ciudad que hallaron en una caja fuerte.
Comienza a llover intensamente el domingo a la noche y Albert, sabiendo que las aguas van a empezar a subir en los desagües no quiere ningún riesgo. Salen a las 2:00 de la mañana del domingo 18 de julio con el agua hasta el pecho. Borran huellas e indicios y escriben con tiza: "Sin armas sin odio y sin violencia". Horas después se reparte el botín en una casona en las afueras de Niza.
El después
La investigación policial no avanza demasiado. Es el robo más grande jamás efectuado en la historia de Francia. La frase escrita dejada por los ladrones indica que no son bandidos convencionales de bancos y dinero. Spaggiari huye a Estados Unidos.
Algunos indicios anteriores al robo (dos sospechosos andando con botas embarradas en el centro de la ciudad -que habían sido interrogados- pero sin razones tampoco para ser detenidos en ese momento) hacen que la Policía conecte datos y vuelva a ellos. Allanan sus domicilios, encuentran armas y vuelven a encontrar las botas y se coteja que la tierra se corresponde a las muestras tomadas en los desagües. Mientras tanto Albert, irónicamente y aparentemente un poco falto de "fama o reconocimiento" y algo desquiciado; se presenta en la CIA bajo el nombre de Ben, para ofrecer sus servicios como experto en seguridad y manejo de caudales. La CIA avisa por télex a la Policía francesa.
Más tarde dos sujetos (Pellegrin y Bournat) son arrestados ofreciendo ingenuamente lingotes de oro numerados al Banco Crédit agricole de un pequeño pueblo de la región. Estos dos serán los primeros en mencionar a Spaggiari como el ideólogo del robo.
Albert es detenido y en un primer momento va a negar todo. Después confiesa ser el instigador siendo el objetivo final, financiar una organización política de extrema derecha en Italia, para contrarrestar "a la extrema izquierda italiana" (sic). Declara desconocer los nombres de todos sus cómplices en el robo.
Después de 5 meses de estar encarcelado en Niza esperando su proceso judicial, le advierte a su abogado que se va a fugar con la ayuda de amigos de la OAS. Un mes después, estando con su abogado y su juez de instrucción en su despacho, salta por la ventana del tercer piso del Palacio de Justicia de Niza (7 metros de altura) y aterriza parado sobre el techo de un Renault 6. Un cómplice en moto lo recoge instantáneamente y desaparecen en el horizonte de la ciudad…
Su huida va a durar 12 años y va a convertirse en el primer delincuente "mediático" de la era televisada (detalle: poco tiempo después el dueño del R6 va a recibir un cheque de 5000 francos como indemnización por los daños firmado por un tal Albert Mandrino).
En su larga fuga viajará constantemente y con falsas identidades: Brasil, Argentina (declarándose luego enamorado de este país). Se compra un campo y se hace operar por el cirujano plástico Ivo Pitanguy. Fue por Chile, Bolivia, España e Italia (desde donde en varias ocasiones realiza idas y vueltas hasta regiones diversas de Francia) estando escondido en Argentina también, escribe "Les Égouts du paradis" en 1978.
Establece vínculos con los militares argentinos y chilenos (esto aparece en archivos desclasificados de la CIA). Burlándose de la Policía siempre que puede, envía fotos con disfraces y brinda reportajes secretos con algunos medios europeos importantes desde Madrid, Milán, Paris.
El juicio prosiguió, y el día 23 de octobre de 1979 Spaggiari es condenado a cadena perpetua. Cinco de sus cómplices fueron condenados a 8 años de prisión. Todos los restantes miembros de la banda nunca pudieron ser identificados.
Según una revista francesa de la época, Spaggiari contrae matrimonio religioso en su lecho de muerte, en Belluno (Italia) con una admiradora italiana, Emilia Desacco. Que poco tiempo después de su fallecimiento (ocurrido el 9 junio de 1989, a los 56 años, por un cáncer de garganta) llevará su cuerpo escondido en una casilla rodante, hasta su pueblo natal, Laragne-Montéglin, donde se encuentra sepultado en la actualidad.
Conocía esta historia desde hace muchos años por haber vivido un tiempo en Francia. Hace casi 18 años, cuando llegué a Rafaela y viendo algunos carteles inmobiliarios, volvió a resonar en mí ese nombre. Hoy en 2023 viendo las noticias locales y de cierta manera azarosa tal vez, vuelve a reverberar dicho apellido en el contexto actual de la ciudad de Rafaela…
Comentarios