La madrugada de la víspera fue signada por una gran cantidad de delitos que involucró golpizas a jóvenes, personas que resultaron asaltadas a punta de arma de fuegos, robos y demás hechos sumamente violentos. ¿Vamos a dejar que la inseguridad siga escalando?

Uno de los primeros sucesos tuvo lugar sobre calle Azcuénaga al 1300 aproximadamente, donde dos individuos que se dirigían en una moto marca Honda Tornado asaltaron a una mujer de 29 años a punta de pistola.

El episodio sucedió después de las 00:30 hs de la madrugada del domingo, cuando ella se dirigía a la casa de su pareja, quien afortunadamente alcanzó a salir y ahuyentar a los delincuentes antes de que la situación pase a mayores.

El conductor de la moto aparentemente iba con un buzo color azul, gorra, bermuda de jeans, y el acompañante buzo color blanco o gris. Tras el violento episodio, se retiraron por calle Azcuénaga hacia el este y luego por colectora de Av. Ángela de la Casa hacia el sur.

Esto no quedó solamente ahí, sino que posteriormente el servicio 911 informaría que los mismos masculinos dirigidos en esta moto cometieron otros dos hechos delictivos, uno de ellos tuvo lugar sobre calle Tosello al 1900, mientras que el restante se habría producido entre Gandhi y Saavedra.

Al cierre de la edición de este diario, todavía no se había tomado conocimiento sobre la captura de las dos personas.

La gran pregunta que surge ahora es: ¿hasta cuándo los vecinos de a pie seguirán padeciendo estas situaciones? ¿o acaso están esperando al punto de hartazgo para que cada uno tome el asunto en sus manos? Reaccionemos a tiempo y no esperemos que las cosas pasen a mayores para luego actuar, no olvidemos lo que pasó con Gonzalo Glaría, quien por intentar detener a asaltantes terminó falleciendo en medio de la vía pública. No dejemos que esas escenas se repitan, actuemos, seamos conscientes de que la mayoría de los vecinos sólo quieren vivir en paz, sin tener que andar con ojos en las espaldas cuando caminamos por nuestra ciudad.