A alguien se le ocurrió, a ojo de mal cubero, tirar una cifra y la cifra echó a correr, como circula la moneda falsa. Un dirigente sindical , enojado con el gobierno de Pullaro, replicó lo que otro, por la escacez de pauta pública, lanzó : «La provincia le pagó cinco millones de dólares a Susana Gimenez». Algunos medios porteños, de manera muy poco rigurosa y algunos periodistas santafesinos tambien defraudados por la interrupción del «festival de pauta» de Perotti, lo multiplicaron.

Si lo que lanzaron a rodar, tuviera algún viso de realidad, podriamos estar presencia de un escándalo. Lo que resulta increible, es que nada de lo que se dijo en un twitt, y que fuera replicado con saña por un dirigente sindical docente de Rosario, sin ninguna rigurosidad, es cierto: NADA.

La «denuncia» no estuvo acompañada de ninguna data informativa. Ni siquiera un falso documento, ni un off extraoficial, nada. Sólo una versión, que se supone, está fundada sólo en la aparición de Susana Gimenez en la publicidad aniversario del Quini 6. Por dos meses, Julio y Agosto.

Tras el comunicado emitido por Loteria de Santa Fe, quedaron claras algunas cosas, que siempre es bueno que la población sepa, para evitar malos entendidos.

El Quini 6 no es propiedad de Santa Fe, sino de un consorcio de loterias provinciales, 23 en total, y 6 de esas provincias conforman un Directorio que decide las politicas publicitarias.

A la Loteria de Santa Fe le corresponde, sólo por ser fundadora del juego, la administración de lo que ordena ese Directorio.

El pautado de los spots en los que participa Susana Gimenez, se hizo con Telefe. Del mismo modo que se hizo el año pasado con la figura de Marley, es el canal el que «pone» al protagonista.

Primera conclusión: No existe ningún contrato con Susana Gimenez. Y menos por parte de la provincia de Santa Fe, ni por su Loteria.

El pautado total con Telefe, de acuerdo a fuentes del propio canal, no supera un 8% de la cifra que se menciona. O sea, menos de 400.000 dolares. Que deben ser divididos en dos meses.

Esa inversión, sale de los fondos del Quini 6. O sea, las 23 provincias divididen esos costos, originados en las recaudaciones de sus agencias oficiales. Si se hace la división en dólares, cada provincia aportó 17 mil dólares. Y si a eso se lo divide en dos meses de pauta, lo que cada loteria, a través de los fondos del Quini invirtió por mes es 8.500 dólares. Pasado a pesos, y tomando la cotización «blue», lo que salió de las arcas de cada loteria provincial fue menos de 12 millones de pesos por mes.

¿Alguien puede oponerse a que un juego, que distribuye miles de millones de pesos anuales al sistema de asistencia social de Santa Fe y de cada una de las provincias, «gaste» 25 millones en la difusión y celebración de un juego que convoca a millones y millones de argentinos, dos veces por semana?

NO.

Lo grave entonces, es que algunos salgan a difundir este tipo de versiones, sin chequear el origen, y aprovechando circusntancias dolorosas como las paritarias estatales, vendiendo que se le dan «5 millones de dólares a Susana Gimenez, mientras se hambrea a los docentes».

Evidentemente, algunas personas sufren alucinaciones, nacidas de la falta de dinero, por un lado, y usan esos delirios para intentar sacar ventaja y confundir en las negociaciones salariales.

SOBRE LA PLATA DE LA PAUTA, LOS SILENCIOS DEL PASADO Y LAS VACUNAS DE PEROTTI

Los que padecimos la falta TOTAL de pauta pública de la gestión Perotti y luego la persecusión y las escuchas telefónicas de un tal Marcelo Sain, también sufrimos un festival de coreutas que lo celebraban. Algunos sólo en silencio, otros ni siquiera disimulandolo.

No hace falta ir al archivo para recordar columnas interminables del imputado ex Ministro de Seguridad, lanzando mentiras, presumiendo de pruebas que nunca presentó, y los risueños asentimientos de algunos colegas, que recibian dinero en negro del Ministerio de Seguridad ( los verdaderos sobres) a cambio de replicar campañas que sólo tenian como objetivo desprestigiar a politicos de la oposición y del propio oficialismo, a jueces que se animaban a investigar, a empresarios a los que se iba a extorsionar, y también a los periodistas, pocos, que nos animabamos a plantar pelea.

Eso era soledad, muchachos. Sobran los dedos de una mano para contar los nombres de los que nos opusimos a aquel descalabro de lo público, y a la instalación de un esquema de espionaje desde el Estado.

Aquello implicó mucho aprendizaje. Para el oficio, para la ética profesional, y sobre todo, para entender que el ejercicio del periodismo político es un lugar incómodo.

En ese contexto, y me lo recuerda algún cobarde con cuenta anónima en Twitter, entre otras tantas denuncias fundadas que hicimos desde REC, también contamos que el gobernador se habia aprovechado de la llegada de vacunas de manera privilegiada a los sanatorios amigos de Rafaela, y que le había permitido, antes que al resto de los santafesinos, incluso del ex gobernador Miguel Lifschitz, darle la vacuna a su ex esposa y a su madre.

«Vos tambien mentias para atacar a Perotti. ¿ O no te acordás de las vacunas?» me dice el Troll.

Entonces me caben dos respuestas a esa infamia: 1) Estás admitiendo que lo de la Loteria es una mentira. Y 2) No. No mentimos. Menos con el tema vacunas.

Cuando denunciamos la vacunación de la madre y la ex esposa de Perotti, lo hicimos porque se comunicaron con nosotros, empleados de un sanatorio privado de Rafaela y porque hablamos de manera directa con personas involucradas en aquella primera ola de vacunaciones paralelas, para algunos privilegiados.

Denunciamos lo de Rafaela, lo de Reconquista, lo del Hospital de Granadero Baigorria y lo de los funcionarios del Ministerio de Cultura. Todas las denuncias fueron confirmadas por la justicia, incluso los hospitales que mencionamos terminaron intervenidos.

Claro que Perotti usó TODA LA FUERZA DE LOS MEDIOS para desmentir lo suyo. PERO NUNCA NOS INICIÓ NINGUNA ACCIÓN PARA QUE LO RATIFIQUEMOS. Todos los medios que nunca publicaron nuestras denuncias, se esmeraron en desmentirnos. Signo de aquella época: Sólo se hablaba de los temas que el gobernador quería.

Seré más concreto: Luego de aquella denuncia, el ex gobernador SE AUTODENUNCIÓ frente a la fiscalía DE DELITOS ESPECIALES a cargo de la entonces fiscal, Dra. Mariela Gimenez. Se presentó él y sus dos hijos, quienes se practicaron exámenes de sangre para «demostrar que no se habian vacunado».

Nunca hablamos de él, ni de sus hijos. Sólo de su madre y su ex esposa.

NOS PRESENTAMOS ANTE LA FISCALÍA, pero nos negaron la participación porque no eramos los denunciados. Y nos NEGARON LA CONDICIÓN DE TESTIGOS.

O sea: Perotti para desmentir nuestra denuncia, optó por autodenunciarse, probó lo que nunca habiamos puesto en dudas ( de él y de sus hijos), no aclaró lo de las do personas que mencionamos, y finalmente NO NOS PERMITIÓ probar en la justicia lo que habiamos afirmado.

¿Por qué? Porque sabía que era cierto, y porque a él le constan los testimonios que podiamos ofrecer.

No mentimos. Nunca dijimos lo que no podiamos probar.

Entonces, mas vale separar la paja del trigo, y poner las cosas en su lugar: el periodismo puede ser opositor, claro. Incluso, eso lo vemos desde hace años en los canales porteños, de un lado y del otro, puede ser militante de una causa política.

Lo que no puede nunca el periodismo, es mentir de manera maliciosa para obtener resultados personales.

Eso se llama, periodismo extorsivo. Y no hay un sólo dirigente político que pueda decir de nosotros, que lo hayamos practicado jamás.

El tiempo pasa. Los gobiernos pasan. Y la física, va poniendo a las cosas en su debido lugar.

Fuente: Conicherep