El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) difundió este martes el informe de precios al consumidor de noviembre, en el que uno de los datos sobresalientes fue la fuerte suba que registró el valor del asado.
Según los datos oficiales, el kilo se ubicó en 763,21 pesos, lo que significa un salto del 12,7 por ciento con respecto a los 677,14 pesos de octubre.
Fue así el alimento con mayor inflación del mes pasado, superando al 11,4 por ciento que se encareció la carne picada, y al 11 por ciento del limón.
Por detrás, otros cortes de carne bovina sufrieron importantes subas: la nalga, nueve por ciento; la paleta, 8,3 por ciento; y el cuadril, 8,1 por ciento.
Evolución de la carne
Asimismo, el salto intermensual del asado fue el segundo más alto desde abril de 2016 hasta hoy: solo se situó por debajo del 28,5 por ciento de aumento registrado en diciembre de 2020.
Asimismo, desde mayo pasado, cuando comenzaron a implementarse las restricciones a las exportaciones de carne bovina, el corte más consumido por los argentinos subió 20 por ciento.
Un aspecto importante a destacar es que el alza del asado se combina con una faena que en noviembre sufrió un derrumbe de más del 30 por ciento.
En definitiva, se cumplieron las previsiones que habían formulado desde el agro de que un cepo a las exportaciones no iba a reducir los precios sino que, por el contrario, los iba a terminar acelerando.