Días pasados en Diario CASTELLANOS dábamos cuenta de un hecho policial ocurrido cuando dos individuos se habían presentado en una vivienda de calle Jaime Ferré al 1400 del barrio Italia y amenazaron a una menor exhibiéndole un arma de fuego. Agregábamos que la víctima llamó a su abuela y estos sujetos se enfrentaron con ellas. Uno de los 'apretadores' les manifestó que debían retirarse de la casa porque era de él y que de lo contrario la iban a pasar mal, yéndose luego los dos implicados en un auto gris hacia la ciclovía de Joaquín V. González. Luego, por indicaciones del Despacho 911 y del Centro de Monitoreo Municipal, personal de la Brigada Motorizada logró dar con el rodado en una finca de calle Formosa al 2200 y junto a él se hallaban los hombres mencionados anteriormente. En forma inmediata el dueño de la finca hizo entrega de un celular que su hijo había dejado en el interior de la casa. Los uniformados procedieron al secuestro de un celular, de la vestimenta usada por los causantes y del rodado en el que se conducían. Dieron conocimiento a la fiscal en turno quien ordenó la detención de los sujetos, y que sean notificados por los delitos de Coacción agravada por el uso de arma de fuego y Robo calificado. Los mismos fueron remitidos a la Alcaidía local.

sucesos

Dos 'apretadores' terminaron detenidos por la policía

Cautelar y preventiva

Así, poco después del mediodía de este lunes -ya los habían imputado el domingo- se llevó a cabo la audiencia de medidas cautelares solicitada por la fiscal Lorena Korakis y presidida por el Juez de la Investigación Penal Preparatoria, Dr. Javier Bottero. En el banquillo de los acusados se encontraban Eduardo Molina, alias "El Chancho"; y Juan Nicolás Mogica. Ambos fueron acusados de ser presuntos autores responsables de los delitos de Amenazas calificadas y Robo calificado por uso de arma de fuego; y Coacción agravada) aunque los defensores de ambos pusieron en tela de juicio la calificación jurídica elegida.

Respecto de este tema el juez descartó la figura del robo calificado por la sustracción del teléfono pero aceptó las restantes y decretó finalmente una prisión preventiva por noventa días mientras continúa la investigación.