La jueza penal de Reconquista, Claudia Bressán, fue sancionada por la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe por haber realizado una audiencia en los Tribunales de esa localidad en donde le otorgó la libertad a un preso sin la presencia de un Fiscal del Ministerio Público de la Acusación.
El hecho remonta al 26 de febrero del 2020 en el marco de una Audiencia de revisión de la prisión preventiva que pesaba en ese entonces sobre el detenido Juan Pablo Rosetto y a la cual había sido fue convocada la Defensa del recluso, como también el fiscal Alejandro Rodríguez.
La Audiencia había sido fijada por la Oficina de Gestión Judicial (OGJ) a las 10:00 de la mañana. Sin embargo, como el Fiscal tuvo un problema de salud, avisó a la OGJ que iba a tener una demora, por lo que llegó a la sala a las 10:27 hs, cuando la Audiencia ya finalizaba con el fallo de la Jueza de primera instancia.
La insólita resolución judicial fue apelada y un Juez de la Cámara de Apelaciones declaró inválido el fallo de Bressan y con posterioridad se dio inicio a una investigación administrativa para evaluar el desempeño de la magistrada. El caso fue luego revisado por el Procurador ante la Corte, Jorge Barraguirre, que en su dictamen pidió que la Jueza sea sancionada.
A tres años de aquel anómalo proceder de Bressan, la Corte Suprema dispuso sancionarla con dos días de suspensión, con asistencia al lugar de trabajo y con el descuento de los días en su sueldo.
"Celebrar la Audiencia en esas condiciones, no fue garantía de nada, ni siquiera de los derechos del imputado, cuyo derecho estaba garantizado -si no se celebraba la Audiencia-, por el vencimiento del plazo automático del plazo de prisión preventiva", consideró el fallo judicial de la Corte.
"Una Audiencia celebrada sin una parte desemboca necesariamente en una decisión inválida por basarse en un acto celebrado sin cumplimiento de las formas esenciales", agregó la resolución del máximo Tribunal que lleva la firma de Daniel Erbetta, Rafael Gutiérrez, María Angélica Gastaldi, Mario Netri, Eduardo Spuler y Roberto Falistocco.
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