Tal como confirmó el jefe del Departamento de Control Alimentario del municipio, Hugo Varela, se procedió a la confiscación de los productos, ya que “los mismos eran trasladados en un vehículo no habilitado para el transporte de alimentos, además de no contar con la refrigeración necesaria que requiere este tipo de productos”.
La mercadería incautada consta de un total aproximado de 500 kg. de embutidos, entre ellos chorizos secos, bondiolas, pancetas, jamón crudo, jamón cocido y salame por metro. La misma quedó depositada en bolsones sanitarios precintados a la espera de la determinación de la jueza de faltas.
Fuente: Radio Estación
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