14.26 Escuchas telefónicas y videos de cuando recibió material estupefaciente por parte del familiar de un preso y luego lo ingresó a Penal, evidencias claves de la investigación.

Un penitenciario santafesino aceptó la prisión preventiva, luego de que lo acusaran de ingresar celulares, alcohol y estupefacientes al pabellón 10 de la Cárcel de Las Flores, donde cumplía funciones. La cautelar fue dispuesta por el juez Octavio Silva este lunes por la mañana.
La fiscal de la Unidad de Delitos Complejos María Laura Urquiza atribuyó a Matías Nicolás "Chino" Contreras (34) los delitos de "cohecho pasivo reiterado" y "tenencia indebida de arma de fuego de guerra", tras lo cual solicitó la cautelar de máxima. La defensa, a cargo de la abogada Elsa Tracy Dunigan, se allanó al pedido.
Contreras es empleado del Servicio Penitenciario y hasta su detención desarrollaba sus funciones en la Unidad Penitenciaria N°2 "Las Flores", como celador del Pabellón 10. Se lo acusa de haber ingresado, de forma reiterada y habitual, "celulares, bebidas alcohólicas, artefactos eléctricos y estupefacientes" a los internos a cambio de dinero.

Diez comunicaciones

Según lo atribuido, la fiscalía pudo comprobar transacciones realizadas entre el 23 de diciembre de 2021 y el 10 de febrero de este año. El suboficial utilizaba su celular particular para contactarse -mediante llamadas o mensajes de texto- con los presos y con sus familiares o allegados, y así establecer el precio de sus "servicios" y dónde se reunirían para que le entregaran aquello que debía ingresar de forma clandestina al Penal.

- "Ei chino son dos celu común y un 25, no me mates jajaja"

- "5 c/ celu y lo otro 2… y te estoy haciendo precio". "5 cada uno… o máximo te hago 9 los 2… 9 los 2 celus y 2 mil el faso"

Esa es una de las conversaciones entre el "Chino" Contreras y un interno del pabellón 10. La fiscalía cuenta con al menos 10 comunicaciones entre el penitenciario e internos o sus familiares, según surge de las tareas realizadas por los agentes de Asuntos Internos.
Antes de detenerlo, la Dra. Urquiza ordenó que se registrara en video uno de los intercambios pactados por Contreras. Así, además de contar con las escuchas telefónicas, se tiene la filmación en donde se observa al suboficial recibir material estupefaciente de las manos de una persona allegada a un interno.
El jueves pasado, cuando el penitenciario ingresó dicho material estupefaciente al Penal, fue detenido por el personal de Asuntos Internos. En paralelo, se realizó un allanamiento en su domicilio de Chubut al 6500 (barrio Yapeyú), donde se secuestró una pistola calibre 9 mm. Por esto, además del "cohecho pasivo reiterado" se le endilgó el delito de "tenencia ilegítima de arma de fuego de guerra".
Según lo dispuesto por el juez Silva, el suboficial Contreras permanecerá tras las rejas a la espera de juicio oral.

Justicia Federal

Debido a que algunos de los "paquetes" que recibía y entregaba el penitenciario contenían material estupefaciente y estos delitos tienen competencia federal, las actuaciones y evidencias fueron remitidas al fiscal federal Walter Rodríguez.