En la noche de ayer, efectivos de Cuerpo Guardia Infantería, se encontraban prestando colaboración a la Comisaría 13 por un desorden familiar, en una vivienda de calles Gabriel Maggi y Alvear; cuando llegaron al lugar una mujer y un hombre, sosteniendo un bebé en brazos, y clamando por ayuda. Se vivieron momentos de tensión mientras les explicaban a los uniformados que el pequeño no podía respirar. Éstos, sin dudarlo, tuvieron la iniciativa y el instinto de trasladarlos en el móvil policial con sirenas y balizas encendidas, hacia el nuevo Hospital Nodal. Allí, una doctora logró estabilizar al infante, de 40 días de edad, que se había ahogado con leche. Los agentes que intervinieron eficazmente son el Oficial de Policía Mansilla Diego y el Suboficial de Policía Benites Ignacio.
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