La avanzada oficial de reconocimiento de tierras a las comunidades “autopercibidas” mapuches en Mendoza encuentra cada vez más resistencia en la oposición nacional, que activó denuncias también en la Patagonia cordillerana, y profundiza los reclamos con nuevas caravanas en protesta contra la cesión de miles de hectáreas por parte del Estado nacional.

El senador Alfredo Cornejo, junto a su par chubutense Ignacio Torres y al auditor Miguel Ángel Pichetto cargaron contra la Dirección de Seguridad y Fronteras por supuestas irregularidades cometidas en Chubut y Santa Cruz entre 2003 y 2015, acerca de “ventas espurias” de terrenos en zonas limítrofes que “ponen en riesgo la seguridad nacional”.

“Es un entramado de corrupción”, afirmaron los dirigentes opositores, por lo que elevaron un pedido de informes para que se investigue y se den las explicaciones en el Congreso. La solicitud se hizo ante el Ministerio de Seguridad de la Nación, que encabeza Aníbal Fernández.

La intención de Pichetto, Torres y Cornejo es que el ministro sea interpelado en el Congreso acerca de “la corrupta y fraudulenta actuación” del organismo, en complicidad con supuestos mapuches, funcionarios kirchneristas a nivel nacional y municipal, sobre la comercialización de terrenos a extranjeros a “precios irrisorios” en la Patagonia, poniendo como ejemplo el controversial caso de la estancia “Mamul”.

En este sentido, el fiscal federal Eduardo Taiano y la jueza María Servini vienen investigando la realización de otras tres supuestas “transacciones espurias” de campos durante ese período en Zonas de Fronteras, con similar operatoria de “entrega de terrenos de valores millonarios y de alta sensibilidad para la seguridad nacional” a mapuches para su posterior reventa a extranjeros, quienes interponían sociedades “pantalla” y usaban testaferros y documentos falsos, según denuncian los referentes de la oposición.

También, además de lo que ocurre en Mendoza, solicitaron al Inai informes sobre cesión de tierras fiscales a supuestos miembros de la comunidad mapuche en Chubut, Río Negro y Santa Cruz. Y reclamaron explicaciones al Registro Nacional de las Personas (Renaper) sobre la emisión de documentos falsos para los compradores. “Es una operación que resulta altamente preocupante, sobre todo a la luz de las recientes investigaciones respecto a la emisión de documentación irregular a ciudadanas rusas para otorgar domicilios falsos a nombre de indigentes o “prestanombres””, indicaron.

En este sentido, Pichetto, Cornejo y Torres se refirieron al caso “Mamul”, sobre la venta apócrifa de terrenos en las inmediaciones del Lago Rosario, en Chubut, perteneciente a la municipalidad de Trevelin. “Allí, en el 2000, el entonces intendente local, Carlos Hugo Mantenga, dirigente kirchnerista que actualmente se desempeña como presidente del bloque de legisladores provinciales del Frente de Todos, simuló una venta por U$S35.000 de la estancia “Mamul”, de alrededor de 20.000 hectáreas e integrada por tierras fiscales, a falsos descendientes de mapuches”, expusieron los legisladores.

“Ese mismo campo fue vendido por U$S 7,8 millones a un oligarca ruso, Alexander Katunin, quien utilizó un pasaporte argentino adulterado para la compra. El pago, que en la demanda del caso es entendido como una coima hacia el exintendente Mantenga, fue realizado en Andorra, un paraíso fiscal”, indicaron. Para graficar el tenor de la denuncia, los denunciantes estimaron que en la actualidad la estancia “Mamul” registra un valor de mercado de U$S100 millones. “Su terreno incluye el 45% del lago Rosario, una de las reservas de agua dulce más grandes del país, en donde se realizan diversas actividades económicas y recreativas”, advirtieron.

Asimismo, los dirigentes dieron a conocer los alcances de la demanda penal presentada contra el titular del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI), Alejandro Marmoni, por las resoluciones sobre la cesión de tierras, que en territorio cuyano superan las 26.000 hectáreas en el sur provincial. También, mostraron su preocupación por la extensión del conflicto a otras jurisdicciones del país, sobre todo en Río Negro y Neuquén.

“En Río Negro están reclamando más del 50% de su territorio, en Neuquén más de un tercio y en Chubut están surgiendo temas nuevos”, alertó Cornejo, uno de los principales detractores del reconocimiento que hace Nación de estos pueblos que se consideran originarios en territorios locales, lo que abrió una nueva grieta; esta vez con los historiadores, tal como contó LA NACIÓN.

El senador Cornejo detalló que “este es un tema de alcance nacional. Los porteños y la elite política y empresaria sindical de Buenos Aires deben empezar a tomar en serio este problema, tanto como el del narcotráfico en Rosario o como lo es la inflación en todo el país. Este problema corroe las bases mismas del Estado Nación y de la soberanía. A su vez influye sobre nuestro desarrollo económico, que por esas casualidades buena parte de los territorios que se reclaman contienen muchas riquezas, en materia minera y de gas, y cuentan con una enorme potencialidad de negocios”.

Por su parte Torres, atento a la escalada de reconocimientos que hace el Inai, sumó: “Nadie puede tomar tierras que no le corresponden, nos preocupa que el gobierno siga mirando para el otro lado y el negocio inmobiliario que hay detrás de quienes se embanderan detrás de la premisa de pueblos originarios”.

En este sentido, Pichetto dejó en claro su posición: “Los kirchneristas, siempre que pueden hablan de Malvinas y la soberanía, pero hacia adentro del territorio argentino hacen una política de entrega”. También, el precandidato presidencial insistió en que los mapuches “vinieron de la Patagonia chilena y fueron un pueblo invasor, por lo que estamos ante un verdadero disparate”.

Pichetto fue más allá y lanzó una advertencia, mirando la expansión de los pedidos de algunos pueblos originarios. “Hay muchas personas del conurbano que ya se autoperciben mapuches. Hay más de 1.000 ahora que están reclamando tierras a lo largo y a lo ancho del país. En el Sur se le suman hechos de violencia. Son grupos peligrosos que utilizan el sabotaje, la agresión a privados, quema de propiedades, entre otras”, completó.

Mientras se profundizan las denuncias contra el accionar del Ejecutivo nacional, en Mendoza crece el rechazo contra el reconocimiento de tierras a las comunidades que se identifican con el pueblo mapuche. Por eso, tras la movilización realizada a mediados de febrero en el sur provincial, ahora se prepara un “caravanazo antimapuche” en la capital mendocina. La manifestación será este sábado al mediodía y partirá desde el Parque General San Martín, con destino al microcentro provincial. (La Nación)