En la sesión ordinaria, el Concejo Municipal votó cuatro proyectos, destacándose la modificación de la ordenanza tributaria 2023, que finalmente no se aprobó el proyecto del Ejecutivo del 48,51% a partir de julio sino del 47,5% en forma escalonada bimestralmente: el 20% en julio, el 11% en septiembre y el 11% en noviembre. El valor de la UCM (Unidad de Cuenta Municipal) se fijó en $ 11,46 para el período julio-agosto, en $ 12,72 septiembre-octubre y en $ 14,12 para noviembre-diciembre.
Durante un cuarto intermedio pedido por Leonardo Viotti, el objetivo consensuado fue no desfinanciar las arcas municipales, brindando los servicios, pero también teniendo en cuenta la situación que vive el contribuyente, en el contexto inflacionario nacional. De esta manera, fue rechazado el proyecto del Ejecutivo de llevar la UCM de $ 9,55 a $ 14,18 a partir de julio, lo que representaba un 48,51% en base a la fórmula polinómica.
Martín Racca se encargó de justificar el proyecto: "Estamos en un proceso inflacionario, con cálculos y estimaciones, variables macroeconómicas, incertidumbre. El 48,51% representaba en valores nominales para la categoría 6 de los barrios 2 de Abril, Antártida, Barranquitas, Zazpe, Malvinas, Italia un valor máximo de $ 2.400 a fin de año, con una actualización de $ 90 mensuales, son 2 bizcochos; para el casco céntrico y macrocentro, Lehmann, 9 de Julio, San Martín, Mosconi, entre $ 180 y 200. Se destina a los jardines, oficina de asistencia, comedores, relleno, servicios públicos de recolección, espacios verdes. La inflación impacta en las cuentas municipales, nunca se llegó a cumplir con el aumento de la UCM. Hay que salir de la discusión política para que sea técnica; hay que trabajar con variables, no cada 6 meses u otra fórmula".
Leonardo Viotti destacó que "el objetivo es cuidar las arcas municipales y brindar los servicios; realizar actualizaciones según lo que le pasa al trabajador, a nadie le llega el 48,51% de aumento; una propuesta conjunta, bimestral y acumulativa".
Ceferino Mondino: "Hay que analizar quién gobierna la ciudad, la provincia y la nación; este último es el gran responsable, un desastre económico de esta gestión que espero pronto termine. Hay mucha gente que la pasa mal, gente excluida y pobreza en Rafaela. Se necesita eficiencia en el gasto de los recursos, pedimos explicaciones y planes de acción, pero no respondieron como la seguridad vial".
Racca recordó que "en la década del 90 inicié la carrera universitaria. No había inflación ni trabajo, fue la peor crisis de la historia de la Argentina".
Le salió al cruce Miguel Destéfanis: "De los últimos 32 años, 2 años estuvo De la Rúa y 4 años Macri, el 80% restante el peronismo; son comparaciones malas, la situación va empeorando, siempre pidiendo a los contribuyentes y a los privados".
Soltermam: "Gobernaron el país hace pocos años, dejando la obra pública paralizada, la industria destrozada, una deuda a 100 años y una situación socioeconómica caótica".
Escándalo por carteles
Al final de la sesión se produjo un fuerte altercado entre algunos concejales. El detonante fue el cartel #JusticiaPorCecilia que pusieron delante de las bancas de los ediles. Valeria Soltermam acusó al presidente Germán Bottero de faltar al respeto institucional y no plantearlo previamente, cuando nunca fueron visibilizadas las mujeres rafaelinas víctimas de femicidio. Le salió al cruce Alejandra Sagardoy (autora de los carteles) diciendo que no era así porque solicitaron justicia desde hace mucho tiempo por todas las mujeres.
Bottero pidió disculpas y dijo que la próxima vez será en forma consensuada o que cada uno lo haga en su propia banca. También aportó Miguel Destéfanis, recordando que Soltermam hizo reconocimientos a personas que se presentaron por primera vez en el recinto ese día.
Una vez bajada la bandera de ceremonia y concluida la sesión, la cosa no terminó ahí, siguieron discutiendo Soltermam y Franco Bertolín; este último trajo a colación que se pusieron otros carteles en otros momentos durante los seis años que él está como secretario del cuerpo (lo que es verdad), sumándose Brenda Vimo y Bottero para calmar la situación con "tonos de autoridad".
A decir verdad, la sesión ordinaria tuvo tres momentos distintos: la emotividad por el reconocimiento de "Los Acordeones solidarios", la discusión política por la suba de la tasa y el escándalo por unos carteles con cruces fuera de lugar: los trapitos se lavan en casa, no en público.
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