Los anuncios económicos que brindó recientemente el Gobierno Nacional calaron hondo en el bolsillo de los argentinos. Los precios varían en base al día a día y esa situación parece replicarse en todas partes, incluido en la ciudad de Rafaela, donde la incertidumbre parece apropiarse de los comerciantes, quienes están en un "tira y afloje" constante con los proveedores para no gastar de más.

Lamentablemente, la situación económica de la Argentina no es para nada alentadora por lo que no es llamativo si vemos que los comercios de barrio se rompen la cabeza para poder tener todos los productos a disposición y venderlos sin arruinar la economía del cliente ni la suya. Así, a partir del diálogo con tres rubros diferentes, encontramos realidades diversas.

"No hubo grandes cambios y tampoco los va a haber. No creo que dependa del cambio de Gobierno. Sí, seguramente, van a empezar a cambiar algunas políticas y eso puede verse reflejado en los precios", reconoció Carlos, vendedor de una reconocida verdulería de la ciudad en relación a los precios que estos alimentos.

Distinto es el caso que explicó Celina a este medio con los precios que encontró esta semana en el kiosco. "Hubo una locura de aumento de precios, de todos los proveedores, de todas las empresas. Algunos ya tienen los porcentajes, otros prefieren esperar o te los pasan cuando ya hiciste la compra y llega con el aumento", expuso. Esos incrementos, rondan entre un 20% y un 40% dependiendo el producto que se busque.

Claro que la lucha constante de precios repercute aún más en esta época del año cuando se piensa en las fiestas, con navidad y año nuevo a pocos días de su celebración y la intención de reunir a la familia con la "mesa llena".

Frutas y verduras

Uno de los alimentos más solicitados por los rafaelinos cada vez que va a la verdulería es la banana. Sin embargo, las dificultades existentes en cuanto a la exportación, se hizo difícil conseguirlas. "Fue un año complicado para el producto, porque no liberan los dólares para pagarlos. Países como Paraguay prefieren no venderle a la Argentina porque no se les paga", lamentó Carlos.

Si se destraba o no la situación dependerá pura y exclusivamente de cómo funcionen las medidas económicas impuestas por el Gobierno Nacional. Mientras tanto, el comercio funcionará a oferta y demanda. "Cuando falta un producto, sube mucho el precio. Cuando hay mucha producción y la demanda está tranquila, el precio tiene tendencia a bajar. Así que bueno, estamos todos expectantes", agregó.

Si nos centramos en la banana, su último incremento fue entre el 20% y 25%. Pero no fue el único producto, ya que existen otros grandes aumentos por faltante como es el caso de las hortalizas, el morrón. Esos precios fueron en alza y en el mercado se ve poco. Por otra parte, las frutas de estación mantienen sus valores. "Estamos arrancando la temporada y el precio es bastante razonable teniendo en cuenta el presente económico. Estamos esperando que evolucionen un poco más las ventas y creo que mercadería va a haber", cerró el verdulero entrevistado.

Pedir precios y después comprar

En el kiosco de barrio, el último gran aumento estuvo relacionado al área chocolate. Diferentes marcas de renombre vieron afectados sus precios provocando el asombro y la frustración de vendedores y compradores. "Voy recibiendo constantemente las listas de precios, todos los días y siempre me dicen lo mismo, que seguramente habrá otra movida cambiaria la semana siguiente", lamentó Celina.

Esto genera una incertidumbre tal qué, ahora los vecinos preguntan y repreguntan precios antes de adquirirlos porque muchas veces van al almacén del barrio con la plata justa. "Antes esto no pasaba. Ahora, te piden el precio de los chocolates, del fiambre y después eligen. Hay gente resignada que compra lo que le alcanza y en otros casos rechazan el producto cuando comunicamos el precio", agregó la comerciante.

Así, entre tantas dudas, desde el sector sólo piden una cosa: frenar la inflación de precios. "Se debe buscar una medida para regular los precios, porque hoy hubo un aumento importante, pero nadie sabe qué va a pasar en los siguientes meses. Sería descabellado seguir aumentando", cerró.

¿Y la carne?

Otro de los rubros que es una incógnita es el de la carne. Recientemente, los medios nacionales se hicieron eco de una suba superior al 40% en el valor del kilo de carne en la hacienda. Diario CASTELLANOS consultó a un carnicero de la ciudad, pero por el momento no quiso brindar precisiones sobre cuáles serán los precios.

En principio, los valores rondarían los $ 7.000 y $ 8.000, pero todavía resta saber otros incrementos como el valor del maíz, el alimento del ganado. "Los precios van aumentando. Hoy pueden valer siete y el lunes ronda los diez, once mil pesos Para mi va estar en torno a los $ 12.000 el kilo de asado, provocando un aumento del 120% o 130% en 15 días", explicó.

"Los precios se van a ver reflejados recién a partir de la semana que viene", cerró la fuente a este medio.

A pocos días de que finalice el 2023, la incertidumbre se apodera del sector comercial y pone en jaque el bolsillo de la ciudadanía.