11:02 - Con el cambio de clima, se termina la utilización de los espacios al aire libre. La gente reserva dentro del local, y esto trae complicaciones en la capacidad de cada uno de los locales.
Se terminó el verano, comenzó a llegar el frío y los rafaelinos dejan de utilizar los espacios al aire libre. Al menos, para sentarse a tomar o comer algo en las tardes noche, y obliga a los gastronómicos a distribuir de mejor manera la clientela, con la capacidad que tienen destinada.
Es por esto que los empresarios gastronómicos pedirán llevar su capacidad al 50%, como mínimo, para no perder su caudal de ventas, teniendo en cuenta que no se podrán utilizar las mesas fuera del local. "El verano fue bastante amigable con la situación, porque nos permitió el uso del espacio público. Y ahora vuelve la preocupación, por más que se pueda, la gente no va a aceptar sentarse en la vereda y en los canteros por una cuestión lógica", le dijo a Diario CASTELLANOS Silvina Imperiale, presidente de la Cámara de Propietarios de Hoteles, Restaurantes y Bares (CAPHREBAR).
Recordemos que el sector puede albergar sólo el 30% de su capacidad, con las distancias pertinentes, una mesa que no supere los 6 comensales, y demás. "Cómo está la situación sanitaria en nuestra zona, que no es apremiante ni de una mayor preocupación, por lo menos por estas horas, hemos pedido la posibilidad de ampliar esa capacidad y elevarla al 50%", remarcó la empresaria.
Imperiale sostuvo que ya existe el compromiso de las autoridades municipales de tener una reunión para tratar el tema.
Gestiones en curso
Imperiale sostuvo que ya existe el compromiso de las autoridades municipales de tener una reunión para tratar el tema. El encuentro se llevaría a cabo la próxima semana, teniendo en cuenta que este miércoles será feriado y esto atrasa la agenda. Recordemos que, hasta el momento, han trabajado en conjunto y fueron dando pasos a la par en este tiempo: "creemos que la situación sanitaria amerita poder abrir o ampliar un poco esa capacidad porque dentro de los números venimos bien. Estamos en situación sanitaria que nos permite ampliar la capacidad. Los locales más pequeños ven afectado su funcionamiento, ya que los gastos operativos para atender al 30% es el mismo que al 50%; los costos energéticos, los servicios y los salarios, entre otras cosas", relató la presidente de CAPHREBAR.
En mucho tiempo, los comercios utilizaron la modalidad take away y delivery, pero para la comerciante sólo fue "un algo más", teniendo en cuenta el poco caudal que se concretó. "En los tiempos que corren todo es una unidad de negocios, no cómo antes, donde estábamos más relajados y distendidos. Hoy no alcanza con un delivery y necesitamos más tiempo en los salones", culminó.
Por último, Imperiale volvió a recordar que la situación de los hoteles es "agónica". Hay que remarcar que los mismos se nutren de viajantes, mientras avanza la modalidad de home office avanza y llegó para quedarse. "La pandemia ha acelerado todos los tiempos y si bien hay presencia de viajantes, algunos nos visitan o se acercan, ya no es como antes, las visitas son espaciadas y breves porque el grueso de trabajo se hace de manera remota. Al no haber eventos grandes, la actividad hotelera está bastante complicada", cerró.
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