Por Marcos Corach
Decir Rafaela es decirnos a nosotros mismos. Rafaela es mi casa compartida. Rafaela es mi familia, mis amigos, mis compañeros, mis adversarios... Rafaela son nuestros clubes, nuestras instituciones, nuestra Municipalidad.
La verdad que tener un día para pensar en nuestra ciudad, más allá de lo celebratorio, que está bueno, es una posibilidad más para reafirmar la importancia del territorio compartido, de la vida en comunidad.
Y en estos tiempos de grietas políticas, de horrores que ofenden a la condición humana como están ocurriendo en Medio Oriente, celebrar la ciudad es también valorar el hecho de que convivamos con nuestras diferencias.
En el laberinto de calles de Rafaela no sólo se entrecruzan caminos físicos, sino también culturas, ideas y perspectivas diferentes. Esa interacción de diferencias forma el tejido que nos da nuestra ciudad, el de ser rafaelinos, y celebro esto.
Respecto de las responsabilidades públicas que me tocó en lo personal y colectivo al asumir el Ministerio de Gestión del Gobierno de la Provincia fueron muchos los desafíos que pudimos concretar puntualmente para Rafaela.
En un breve repaso de los más destacados no podemos dejar fuera la gran obra de acueductos que asegura el 100% de abastecimiento de agua potable en el presente, sino que también brinda una garantía de cara al futuro para quien tenga la responsabilidad de planificar los servicios básicos en adelante.
También la Circunvalación ha sido un desafío muy importante que se logró concretar. La Variante Rafaela ordena el tránsito pesado, agiliza la movilidad, despeja las calles, en fin, hace una Rafaela más vivible para todos y todas.
Pavimento, iluminación, el Plan Incluir Ciudad y una gran cantidad de obras menores han tenido una fuerte impronta marcada en estos años que beneficiaron también directamente a Rafaela.
Creo que haber llegado a un 70% de avance de obra de 21.000 metros cuadrados, 160 personas trabajando en estos momentos sin parar, la terapia pediátrica, también era un desafío que nos habíamos puesto por delante y hoy ya podemos ver sus frutos. Saber que las mamás en Rafaela hoy tienen este espacio para sus hijos es una de las satisfacciones más lindas que uno se lleva después de haber gestionado el Gobierno de la Provincia, con un Estado presente en momentos en que gran parte de los debates pasa por el rol del Estado y como resolver las asimetrías.
En Seguridad también dimos pasos adelante. Hoy Rafaela cuenta con un moderno Centro de Despacho Remoto, el CDR 911 que inauguramos con Omar Perotti. Y el nuevo edificio del 911 que funciona junto a la Guardia Urbana Municipal.
Finalmente podríamos destacar la expropiación de los Almacenes Ripamonti. Una deuda histórica con la ciudad que también logramos resarcir. Hoy esos espacios ya están en manos del Municipio para ejecutar el proyecto del Mercado.
Todas estas gestiones fueron llevadas adelante en un contexto muy adverso. De una herencia económica y social compleja, de una pandemia inédita, una guerra y la peor sequía en años (que afectó directamente al país y a la provincia). Pero el esfuerzo valió la pena porque, así como logramos obras que durarán años en Rafaela, lo mismo hemos podido hacer en el resto de las ciudades de la Provincia.
El Hospital también era un desafío que nos habíamos puesto por delante y hoy ya podemos ver sus frutos. Por ejemplo, en el sector de pediatría. Saber que las mamás en Rafaela hoy tienen este espacio para sus hijos es una de las satisfacciones más lindas que uno se lleva después de haber gestionado el Gobierno de la Provincia.
La historia de un hombre influyente
El rafaelino Marcos Corach tiene una historia muy marcada en la ciudad. Desde hace un par de años se enucuentra trabajando en el Gabinete del actual Gobernador de nuestra Provincia, y es el mayor funcionario de peso político que tiene esta Gestión.
La historia marca que empezó a trabajar con Perotti cuando este fue el intendente de la ciudad por primera vez en los inicios de los '90. Fue Secretario de Municipios y Comunas y Director de Aguas Santafesinas durante el gobierno de Jorge Obeid, y trabajó varios años como Jefe de Gabinete en la Gestión Municipal de este último gobierno de Luis Castellano.
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