Novak Djokovic tuvo que remontar dos sets en contra la noche del viernes para superar la tercera ronda del Abierto de Estados Unidos. La quinta jornada del Grand Slam de Nueva York dejó las grandes sorpresas para los dos últimos partidos, con la eliminación de la kazaja Elena Rybakina, número cuatro de la WTA, y el inesperado desafío que le lanzó el serbio Laslo Djere a su compatriota Djokovic. A sus 36 años, el genio de Belgrado necesitó remar contra corriente durante tres horas y 45 minutos para evitar su eliminación más temprana en Nueva York desde 2006. El reloj de la pista central marcaba 1.30 de la madrugada (2.30 del sábado en la Argentina) cuando Djokovic acabó con la resistencia de Djere, número 38 de la ATP, y cantó victoria por 4-6, 4-6, 6-1, 6-1 y 6-3.

Djere casi le gana al máximo ídolo de su país

"Ha sido uno de los partidos más duros que he jugado aquí en muchos años", reconoció exhausto sobre la pista. "Enorme mérito a Laslo por jugar uno de los mejores tenis que le he visto". Sin nada que perder, Djere se lanzó decidido a derrotar al mayor ídolo deportivo de su país, que durante los dos primeros sets lució una versión muy apagada y una imprecisión inusual en su inexpugnable juego defensivo. Djere, quien nunca ha pisado unos octavos de Grand Slam, desplegó desde el principio un tenis valiente para el festejo de los casi 24.000 aficionados.

Viéndose dos sets abajo, Djokovic se tomó una larga pausa en el vestuario y se automotivó frente al espejo para afrontar una remontada que había logrado ocho veces en su carrera y una vez en el US Open, en las semifinales de 2011 ante Roger Federer.

El mano a mano contra su propio reflejo

"Tuve una charla de ánimo en el espejo", reveló. "Estaba muy agitado y molesto con el resultado y el partido. Tuve que obligarme a levantarme. Creo que el mensaje que envía al resto es que obviamente todavía soy capaz de jugar cinco sets bien entrada la noche. Remontar dos sets siempre manda un mensaje fuerte a los futuros oponentes", apuntó el serbio a los medios.

"Al mismo tiempo, no quiero realmente estar en esta posición, para ser honesto. Prefiero una victoria en tres sets. Ojalá pueda volver a ese camino en el próximo partido", añadió.

A la vuelta elevó su juego y se benefició de los primeros errores de Djene en momentos clave, que le facilitaron igualar el marcador. En el último set se adelantó 5-2 y resistió pacientemente el último conato de resistencia de Djere hasta mantenerse vivo en su camino hacia el 24º título de Grand Slam. Su rival en octavos será el croata Borna Gojo (105º de la ATP). Pero esa será otra historia. (Olé)