A una década de la última competencia del Stock Car en Jacarepaguá, la categoría más importante de autos con techo en Brasil regresó a Río de Janeiro y lo hizo en un escenario más que especial, ya que se implementó un trazado en el aeropuerto Rio Galeao, escenario en el que Matías Rossi se llevó el segundo lugar en la primera carrera, en tanto que no le fue tan bien en la segunda y debió abandonar en el inicio de la misma.
El inicio de la primera para Rossi no fue sencillo, con una intensa batalla con Ricardo Mauricio y Thiago Camilo en la lucha por permanecer entre los primeros cinco. Tras un auto de seguridad a 20 minutos del cierre, en el relanzamiento el de Del Viso aprovechó para ganar algunas posiciones, y luchando con Sergio Jimenez logró hacerse el hueco hasta la segunda colocación.
En la segunda final, con el sistema de largada de grilla invertida, Rossi fue relegado a largar desde la novena colocación y no tuvo tanta fortuna como en la primera largada. En ese primer giro sufrió un duro golpe con César Ramos, ambos yendo contra el muro de contención forzando la aparición del auto de seguridad.