Por Silvano Volpe

En la tarde de ayer, a través de una reunión de prensa organizada por el Club de Automóviles Antiguos de Rafaela en la sala de reuniones ubicada en los boxes del Autódromo "Ciudad de Rafaela", se hizo la presentación oficial del Berta-Tornado restaurado que fue propiedad de la Peña RUEDA (Rafaelinos Unidos en El Deporte Automotor) y que es patrimonio histórico de nuestra ciudad.

En el acto estuvieron presentes Héctor Platini (presidente del CAAR), Rodolfo Gieco (socio fundador de la Peña RUEDA), Lucas Bauducco (Clasicc Cars Garage) Daniel Costamagna (en representación del gobernador Omar Perotti), Gustavo Belinde (presidente de la Subcomisión de Automovilismo de Atlético Rafaela), Jorge Ternengo (ex piloto), Antonio Pesce (chapista) Ricardo Borgogno (integrante de la Comisión Directiva Atlético Rafaela), Héctor Prono (ex piloto), Martín Sevilla (Comisión Nacional Automovilismo Argentino ACTC), entre otras autoridades.

Los testimonios de una jornada inolvidable

La reunión contó con una multitudinaria presencia y fue abierta por el discurso de Héctor Platini, quién comenzó haciendo un repaso de cómo se gestó este proceso hace más de un año a través de un contrato con la Peña RUEDA, Rodolfo Gieco y el intendente Luis Castellano, por el cual el Berta-Tornado pasó a ser patrimonio de la ciudad de Rafaela. "Nosotros (por el CAAR) somos los custodios de ahora en más, cediendo nuestro lugar para que allí sea exhibido. Hemos tenido un gran apoyo de toda la ciudad al momento de necesitar alguna pieza o repuesto, demostrando lo que fue y es la Peña RUEDA. Realmente no tengo palabras para expresar tanta gratitud. Fuimos con Gabriel Rivarossa a hablar con Rodolfo (Gieco) y de ahí en más todo se fue dando de la mejor forma", detalló el Presidente del CAAR.

A continuación, tomó la palabra Lucas Bauducco, quien realizó un resumen de toda su enorme labor para poner en marcha este coche y para dejarlo como el primer día: "Fueron más de 250 horas de trabajo desde junio de 2022. Se terminó todo el pasado martes 1 de agosto cuando vinimos acá al Autódromo a ponerlo en marcha y así dijimos 'Misión cumplida'. Tuvimos muchos contratiempos, se debieron fabricar muchas piezas y elementos. Pero el esfuerzo valió la pena ya que es un auto con mucha historia para la ciudad de Rafaela, manejado por un piloto local como Jorge Juan Ternengo. El auto está igual que cuando corría, con la misma potencia los mismos frenos y listo para correr en cualquier momento".

Luego se dirigió a los presentes Ricardo Borgogno, quien manifestó lo siguiente: "Todo esto es un gran esfuerzo de mucha gente. Quiero que sepan que la M.A.F 1 Nacional que hubo en Argentina por aquellos años estaba a la altura de la Fórmula 1 Internacional de ese entonces. Este coche fue hecho por gente de esta ciudad que tomó la posta y aceptó el desafío. Pido un gran aplauso para Jorge Ternengo y Héctor Prono, quienes fueron sus pilotos. Las 500 Millas de Rafaela que fueron ganadas por un auto de esta ciudad y un piloto local fueron y son la primera competencia en el mundo de aficionados y la tercera de importancia en el mundo, lo que se logró por ese entonces es importantísimo. Este lugar donde estamos tiene mucha historia, con sólo ver las fotos y los apellidos que estarán por siempre acompañándonos. Por lo que vuelvo a pedir otra vez un aplauso como reconocimiento a todos ellos".

Más tarde, visiblemente emocionado por el evento, Rodolfo Gieco expresó sus sensaciones: "Agradezco a Platini y el CAAR que pusieron todo para que el auto esté en marcha. Estoy agradecido a la Municipalidad por todo el apoyo y a Lucas Bauducco por todo el esfuerzo y las ganas que le puso para que esté en marcha. Lamento que no nos acompañen quienes estaban en aquel momento y ahora ya no pueden estar acá".

Por su parte, Jorge Ternengo dijo esto: "Muchas Gracias a la Peña RUEDA por permitirme concretar el sueño de ganar las 500 Millas de Rafaela con este auto. Hay que felicitar a toda la gente que trabajó en aquellos años para que al coche no le falte nada. Fue una época linda que no va a volver más".

El ex piloto Héctor Prono rememoró sus momentos con el coche: "Yo debuté con este auto en el 'Oscar Cabalén' en 1972. Estuve puntero las primeras nueve vueltas y luego tuve un problema. El seis de febrero de 1973 fue mi última carrera en Balcarce con este coche terminé tercero detrás de Rubén Luis Di Palma y Néstor Jesús García Veiga".

También dirigió unas palabras Daniel Costamagna: "Para mí compartir esta mesa con la gente del CAAR es gratificante, esto es historia pura de Rafaela. Muchas Gracias a la Peña RUEDA por tantas alegrías que nos dieron en aquellos años".

El presidente de la Subcomisión de Automovilismo de Atlético, Gustavo Belinde dejó estos conceptos: "Es un orgullo para mí vivir este momento por el lugar que ocupo. En aquellos años yo era muy pequeño pero mi padre me solía contar todo esto que estoy escuchando de los propios protagonistas".

El Berta-Tornado giró por el óvalo rafaelino

Culminada la reunión de prensa llegó el momento más esperado cuando el Berta-Tornado salió del antiguo box conducido por Rodolfo Gieco a girar en el mítico óvalo por espacio de varias vueltas. El andar del coche deleitó a la gran cantidad de público que se dio cita para tan importante evento para la ciudad. Incluso mucha gente no pudo contener el llanto mientras observaban el paso del auto por la recta principal.

Cerca de las 17:00 hs se formó una caravana encabezada por la autobomba del CAAR, la cual estuvo seguida por una camioneta (conducida por Nicolás González) y un trailer (en el que se cargó el auto), y una importante cantidad de vehículos del Club de Autos Antiguos de Rafaela (entre ellos una réplica del Torino que compitió en las 84 Horas de Nürburgring).

Luego de esas vueltas se emprendió la marcha hacia la sede del CAAR en bulevar Hipólito Yrigoyen y Juan B. Justo, donde el Berta-Tornado fue colocado en un exhibidor construido en la explanada de la institución (se desarrolló una presentación del lugar con la presencia del intendente Luis Castellano y el senador Alcides Calvo).

De esta manera, Rafaela vivió una jornada inolvidable para el deporte motor local, con la recuperación de un auto que marcó toda época en el automovilismo de la ciudad en aquellos años dorados.