Pese a tener que jugar a la defensiva y a la ofensiva, Linus Lundqvist subió a un podio de Indy Car por primera vez en su carrera, al finalizar en tercer lugar en el Gran Premio de Alabama.

De hecho, el sueco tuvo que remontar desde la 19° posición en carrera para luego contener los embates de Álex Palou y Felix Rosenqvist, al tiempo de incomodar un poco la marcha de Will Power en el sprint de dos giros con el que el recorrido se completó.

Para el novato de Chip Ganassi Racing, la clave para obtener el resultado fue ser paciente y seguir las instrucciones de su equipo de trabajo, en especial porque tuvo que ahorrar combustible en momentos clave, mientras ejecutaba una estrategia de tres detenciones en pits, aunque circunstancias favorecieron dicho plan, que se basó en overcuts en los dos últimos stints.

Lundqvist manifestó lo siguiente: "Al principio se trató básicamente de ahorrar combustible tanto como pudiéramos, y ver qué podíamos hacer más adelante en la carrera. El equipo seguía diciéndome que alcanzara el número, al final obtendría la recompensa. Eso definitivamente sucedió".

"Después de esa penúltima amarilla, creo que Santino Ferrucci estaba por delante y luego yo. Cuando él entró en pits, tuvimos cuatro o cinco vueltas en las que dimos duro e intenté estirar la ventaja un poco ante el pelotón. Eso en cierto modo hizo mi carrera", describió.

"Salí con gomas suaves nuevas, sin ahorro de combustible. Salí con un grupo de muchachos que tenían 25 vueltas con sus neumáticos, un montón de ahorro de combustible por hacer. Fue un stint divertido para mí. Cuando los muchachos dijeron por radio que estaba tercero, no lo podía creer. Al mismo tiempo me cruzaba con gente como Palou. Suelen estar en lo alto, no podía estar tan mal", prosiguió.

"Súper feliz y súper orgulloso de esto para todo el equipo. Es asombroso", comentó el sueco.

Lundqvist, quien hizo su sexta carrera puntuable en IndyCar, admitió que este podio lo consiguió mucho antes de lo anticipado, en especial tras un arranque de temporada que lo vio chocar en la apertura de St. Petersburg y terminar 16° en Long Beach.

Aún con este logro, el ex campeón de Indy NXT no dormirá sobre sus laureles y tomará el resultado como un impulso a la confianza para seguir perfeccionando su manejo.

"Entrar como novato en este grupo tan duro, va a ser muy difícil. Todo el mundo es muy rápido. Honestamente, tuve un poco de control de la realidad en St. Petersburg y me di cuenta de que el nivel es incluso más alto de lo que pensé que sería", indicó.

Posteriormente agregó: "Pensé que tardaría más. Obviamente poder conseguirlo tan temprano es bueno. También siento que todavía tengo mucho que aprender, obviamente. Poder hacer esto en un fin de semana normal y luchar continuamente por podios, ese será el objetivo".

"Como dije, tengo muchas cosas que aprender. Este es un buen impulso a la confianza y una especie de prueba de que una vez que todo esté bien, podemos hacerlo aquí también de la mejor forma", concluyó.