Fue durante el encuentro interreligioso en el "Espíritu de Asís" que se llevó a cabo en la Parroquia Santa Julia. Participaron referentes de los credos, entre ellos el cardenal Mario Poli.
La Comisión de Ecumenismo y Diálogo Interreligioso de la arquidiócesis de Buenos Aires (Cediarzbaires), la Confraternidad Argentina Judeo Cristiana (CAJC) y la Orden de Hermanos Menores realizaron el jueves 27 de octubre en la Parroquia Santa Julia del barrio porteño de Caballito, el XIII encuentro de oración por la paz "Espíritu de Asís".
Adhirieron a este encuentro la Comunidad de San Egidio, el Movimiento de los Focolares, la comisión de Ecumenismo y Diálogo Interreligioso de la arquidiócesis de Buenos Aires, la asociación civil Acercando Naciones ORG y Acercando Naciones Magazine de Noticias.
También participaron el arzobispo de Buenos Aires y primado de la Argentina, cardenal Mario Aurelio Poli; el rabino emérito de la comunidad judía Bet El, Daniel Goldman; el imán de la mezquita Al-Ahmad, sheij Salim Delgado Dassum (Islamismo); la Sociedad Internacional para la conciencia de Krishna (Iskcon) argentina Hare Krishna (Hinduismo); lama Rinchen Kandro, directora de la Asociación Budista Kagyu Tekchen Choling; Inderveer Kaur Sikh Dhama, de la comunidad Sikh Dharma argentina; Sisquito Flores, en representación de los Pueblos Origninarios; Eugenia Calvi, de la Asociación Religiosa Africanista Ile ti Oya-ogun; el eparca de la Iglesia Greco Católica Ucraniana, monseñor Daniel Kozelinski Netto; el arzobispo Kissag Mouradian, primado de la Iglesia Apostólica Armenia en Argentina y de la diócesis de Chile; y la pastora Mariel Pons, de la Iglesia Metodista argentina; junto con fieles, autoridades nacionales y porteñas.
Durante el inicio de la jornada interreligiosa, que fue acompañada por el coro polifónico nacional de ciegos "Carlos Larrimbe", el párroco Carlos Wait recordó que "hoy aquí tenemos muchas religiones e instituciones representadas, y lo celebro porque la paz ciertamente es una tarea de todos. Nos compete a todos y cada uno desde su lugar, día a día, trabajar por una convivencia respetuosa, por el diálogo, por la escucha". Además, señaló que "la paz es un don. Que podamos tener el corazón disponible para recibirlo y para trabajar por él".
Por su parte, el cardenal Poli expresó que la paz "es la palabra del abrazo, del abrazo de Dios. Todo don viene desde lo alto y esto significa que la paz desciende de Dios. Es un don, un regalo inmerecido, incondicional. Se da a todos".
Luego, cada uno de los representantes de las diferentes confesiones religiosas realizaron una breve oración y reflexión para que el ser humano en cada rincón del mundo encuentre la paz interior y la paz entre hermanos.
Por cada una de las oraciones compartidas se encendió una vela, simbolizando el compromiso por la paz mundial.
Comentarios