09.21 Las autoridades sanitarias anunciaron ayer el tercer refuerzo. Qué pasará en el otoño.

El Ministerio de Salud informó este sábado que en todo el país se avanzará con la aplicación del tercer refuerzo de la vacuna contra el coronavirus para quienes recibieron la última dosis hace más de 120 días.

La decisión fue tomada por los ministros de Salud de las 24 jurisdicciones en la última reunión del Consejo Federal de Salud (Cofesa). En un comunicado, señalaron que se analizó la situación epidemiológica y las experiencias de otros países en la aplicación de refuerzos, y que el acuerdo fue en avanzar con un tercer refuerzo, que en la práctica será un quinto pinchazo contra el SARS-CoV-2.

En esta etapa, se va a priorizar a los mayores de 50 años y a las personas con condiciones de riesgo, tal como sucedió en las instancias anteriores, para luego continuar con el resto de la población.

Pero según aclaró a Clarín Juan Manuel Castelli, subsecretario de Estrategias Sanitarias, todos quienes hayan cumplido ya 6 meses de la aplicación del último refuerzo pueden recibir esta nueva dosis adicional según los cronogramas que establezca cada jurisdicción.

Castelli afirmó que en este momento hay stock suficiente de vacunas para avanzar con esta estrategia de refuerzo. Según detalló, el Gobierno nacional cuenta con 4,5 millones de dosis. Cada una de estas dosis rinde para dos refuerzos, porque en este caso se utiliza el 50% de la dosis. Además, las provincias cuentan con vacunas entregadas previamente.

Las vacunas que se emplearán como tercer refuerzo son las de ARN mensajero de Pfizer y de Moderna. Ambos laboratorios tienen ya aprobadas en Estados Unidos y en Europa sus vacunas modificadas para variantes (las llamadas bivalentes), pero acá se utilizarán como refuerzos las primeras, diseñadas para la cepa original.

Consultado sobre cuándo llegarán a Argentina las bivalentes, Castelli señaló que eso se irá viendo en función del cumplimiento de los contratos, pero que no importa si la vacuna es monovalente o bivalente sino “aprovechar la oportunidad de vacunar”.

“Se está valorando la diferencia que puede haber en la protección con una u otra, pero lo que sí está demostrado es que cuando estás vacunado, tu perfil inmunólogico mejora. Y quienes recibieron Pfizer o Moderna tuvieron una respuesta satisfactoria contra Ómicron, sin complicaciones. Las vacunas funcionan bien”, remarcó el funcionario.

Castelli señaló que están en negociaciones para las compras de vacunas para el 2023, pero no dio más precisiones al respecto. Respecto de la vacuna argentina ARVAC, que tuvo buenos resultados en sus ensayos de fase I y avanzarán próximamente con la II/III, agregó que se evaluará como “todas las oportunidades de vacunas” si los resultados de la instancia clave del estudio clínico son también satisfactorios.

Qué pasará con la vacunación en el otoño

La resolución que tomó ahora el Cofesa parece empezar a delinear cómo seguirá la estrategia de vacunación contra el Covid en la etapa endémica. A lo largo de estos más de dos años y medio de pandemia escuchamos hablar que llegaría el momento del "refuerzo anual", como ocurre con la influenza. Pero, al menos por ahora, los refuerzos están siendo semestrales.

Castelli anticipó que para febrero/marzo, previo al otoño, se reforzará la comunicación de la campaña para avanzar con los refuerzos para el Covid. Y que se analizará cuáles son los resultados este invierno en el hemisferio norte para pensar esa estrategia más a largo plazo. La clave está en una palabra: estacionalidad.

“Virus como el de la influenza tienen una estacionalidad. Los picos se dan en un momento del año y tratás de vacunar antes de esos picos. En el Covid, en cambio, hubo picos en el verano”, apunta. Por eso se busca mantener un nivel de protección en la población, en especial en las de riesgo, también en los meses cálidos. 

El subsecretario remarca que en Argentina la vacunación fue fundamental para evitar otro pico en invierno, cuando hay más probabilidades de contagio de todos los virus respiratorios por una menor ventilación de los ambientes. Y que en esta última parte del año, el virus respiratorio que más está complicando es la influenza, con un pico en octubre cuando por lo general el último ocurre en septiembre.

Respecto del Covid, los datos del monitor de vacunación muestran que mientras 37,8 millones de personas completaron su esquema inicial de dos dosis, sólo 21 millones recibieron el primero refuerzo y apenas 6 millones el segundo. Sobre estos números, en vez de mirar el absoluto Castelli pide ver que el 72% de los mayores de 50 años o más recibieron el primer refuerzo y el 30% el segundo, y que este último dato es menor porque tienen que cumplirse las semanas de aplicación.

Pero admite que las vacunas del Covid son también presa de la paradoja de su beneficio: al descender las internaciones y la mortalidad, menos gente se va a vacunar. “La percepción de riesgo es muy importante. Pero para que las vacunación funcione es necesario vacunarte, y hay que hacerlo antes de que ocurran los eventos”, afirma.

Por eso insta a que quienes vayan cumpliendo los 120 días de la última aplicación, se acerquen a los vacunatorios a seguir con sus esquemas. Respecto de este cuarto refuerzo, en la provincia de Buenos Aires anticiparon que será con vacunación libre en los centros habilitados, al igual que en las instancias anteriores. 

La vacunación contra el sarampión, lenta

El viernes, en otro comunicado, los ministros de Salud del país habían expresado su preocupación por el bajo porcentaje de bebés, niños y niñas que recibieron las vacunas de refuerzo contra el sarampión, la rubéola, las paperas y la poliomielitis.

Según informaron, el objetivo planteado a principios de octubre cuando se lanzó la campaña dirigida a niños de entre 13 meses y cuatro años era alcanzar una cobertura del 95% (casi 2 millones y medio de niños vacunados). Pero a 17 días de finalizar la campaña, todavía falta vacunar a 1,4 millón de ellos. 

A nivel nacional, se vacunó a menos del 40% de la población objetivo y "el lento avance de las coberturas resulta particularmente preocupante en las grandes ciudades", remarcaron los ministros". Un dato que lo muestra: en el AMBA solo el 30% recibió alguna de las dosis.

Castelli reconoció que los pediatras les transmiten consultas de padres que preguntan por qué es necesario vacunarse. Y que, en este caso, la respuesta es la misma que para el Covid: la eficacia de las vacunas se garantiza sosteniendo la vacunación.

Para eso, dijo que van a trabajar en reforzar la comunicación para que los padres entiendan la importancia de cumplir con este refuerzo de la triple viral e inactivada antipoliomielítica. Y que también están coordinando con las jurisdicciones para ampliar el acceso a la vacunación, ya sea extendiendo el horario de atención en los vacunatorios públicos como organizando jornadas de vacunación extra muros, por ejemplo en los jardines de infantes para los chicos que asisten a ellos y sus hermanos. (Clarín)