Esta medida impone una carga adicional a los productores y dificultar el proceso de producción sin una necesidad evidente. En ese y en otros temas, resulta fundamental que se consideren las opiniones y necesidades de todos los actores involucrados en la cadena ganadera antes de implementar políticas que puedan afectar su funcionamiento.
Actualmente, contamos con un sistema de trazabilidad aplicado a la exportación que nos permite acceder a mercados internacionales con éxito. Este mecanismo ha demostrado ser efectivo y eficiente, facilitando el comercio exterior sin imponer cargas excesivas sobre los productores. La implementación de un nuevo sistema de trazabilidad electrónica individual podría duplicar esfuerzos y recursos, complicando innecesariamente un proceso que ya funciona adecuadamente.
Nos preocupa que el gobierno imponga medidas de escritorio que no logran más que burocratizar y sobrecargar la actividad. La individualización electrónica podría representar un costo elevado y una complejidad adicional que muchos pequeños productores no están en condiciones de asumir.
Es vital que el gobierno abra canales de diálogo reales y concretos. La colaboración y el consenso son claves para diseñar políticas públicas que sean realmente asertivas y que no perjudiquen a quienes sostienen día a día nuestra ganadería. Invitamos a las autoridades a escuchar nuestras preocupaciones y a trabajar en conjunto para encontrar soluciones que beneficien a todos los involucrados.
CRA, sus Confederaciones y todas sus Sociedades Rurales, propone la Identificación individual voluntaria de la hacienda y se opone de manera clara y categórica a cualquier cambio que busque implementar un sistema de individualización electrónica obligatorio, sea éste, total o parcial, brusco o gradual.