Registré algunas ideas de la revista española El Cultural donde el objeto de análisis son los festivales de teatro a partir de la pregunta, ¿qué aportan?
Primero señala la importante misión que cumplen en la escena teatral. «Desde los festivales se puede impulsar el trabajo de ciertos creadores con la esperanza de que las obras tengan una distribución y un recorrido más amplio en la cartelera».
En segundo lugar, son el espacio natural para la exhibición de ciertas obras que, por su naturaleza intelectual y artística, no sería posible encontrar en la temporada regular de los teatros comerciales. También el espectador enriquece su experiencia con una serie de actividades paraleles que giran alrededor de la programación del festival.
Se da un hacer que permite entender el hecho escénico o las diversas lecturas que pueden hacerse de un mismo texto.
Por último, los festivales son también un punto de encuentro para que las compañías y los creadores entren en contacto con el público y con otras compañías de origen diverso, motivando y generando reflexiones y dinámicas creativas que, sin duda, benefician a todos.
También se da un componente que solo voy a mencionar: el económico.
Volví al Festival de Teatro Rafaela 2024 como en años anteriores, desde el inicio, pero con menos obras vistas, como progresivamente vengo haciendo a través del tiempo.
Observé y me pareció muy bien que el público pudiese entrar rápido a las salas para escapar de un clima severo debido a las muy bajas temperaturas invernales, pero algunos espacios deberán revisar su habitabilidad durante las funciones, se debe tener en cuenta como se dijo que hay noches muy frías.
Satisface ver en una sala todo un equipo a disposición del público, eso se aprecia de manera especial en el Cine Teatro Belgrano. No están solo en el hall, “patean” la vereda completa varias veces para que todo esté como corresponde. Felicitaciones a su gerenta Patricia Andretich y colaboradores.
Un detalle. Esperar cinco horas a partir de la indicada como inicio de venta es una desconsideración hacia el público presente en el hall, fuese la razón que fuese, por lo demás algo parecido ha ocurrido en otras ediciones.
Otro detalle. No escuché, me parece, que se batallara tanto con el término laboratorio como en oportunidades anteriores. ¿Será así?
En el Acto oficial de apertura solo hubo dos oradores. Agradezco al Intendente Municipal Leonardo Viotti la brevedad de su oratoria y no tanto a la Ministra de Cultura de la provincia, señora Susana Rueda.
Opino que a la presentadora hubiese sido conveniente que le prepararan una sinopsis más breve. Al respecto por lo expresado en los dos párrafos anteriores digo que vamos a apreciar teatro y no a escuchas discursos políticos o comentarios obvios.
Me incomoda que me tomen de público cautivo.
En el comienzo vi las obras que se dieron en el Teatro Belgrano (“Modelo Vivo Muerto”) y el Lasserre. Dos obras muy logradas.
La actriz de la obra "Suavecita", Camila Peralta de CABA realizó en el Teatro Lasserre una actuación sobresaliente, el largo aplauso del público le hizo justicia. Muy Buena preparación actoral, una puesta eficaz, pertinente y un argumento duro según caracterizan algunos espectadores.
Había una vez una canción de María Elena de un grupo cordobés y Les Volátiles de Rosario nos demuestran que el teatro “para toda la familia” no exime de un gran esfuerzo de preparación y construcción de anécdotas de elevada calidad artística, incluido el tan mentado mensaje.
Asistí con mucha expectativa a ver Lo tejió la Juana de CABA, pero no me dejó conforme, el problema no está en la historia que es si se quiere harto conocida y entendible, pero los actores con habla sin volumen y mala dicción en el teatro, me “exasperan”. También es honesto decir que el grupo en algunos momentos logra escenas de carácter risible a las que uno se entrega con entusiasmo.
La obra Matate, amor de CABA con la muy promocionada Érica Rivas es un trabajo notable, llamativo por la actriz que maneja con acierto los parlamentos y el desdoblamiento de personajes, el escenario no le es desconocido, lo transita con seguridad y fuerte carga emocional. La escenografía, bella y de notable presencia tecnológica es el contexto mejor hallado que acompaña con eficacia el desarrollo dramático.
La obra LES REYES de CABA en el CC del Viejo Mercado dirigida por Felipe Saade me colocó en estado de gracia con el teatro, es decir, recibí un "regalo" y también "brillo y belleza". De lo mejor de mi agenda. Difícil que pueda olvidar LES REYES, sobresale con nobleza y nitidez sobre mucha hojarasca teatral en general.
El nudo central de la trama que está trabajada en un lenguaje desconocido es la exótica miseria de quienes detentan el poder.
Los grandes actores de LES REYES son Meche Beno Mendizábal y Damián Mai. Eficaz presencia de Lucía Gómez que hace la música en escena.
En el Acto de Cierre Oficial el orador excluyente fue el intendente, pero el audiovisual, un montaje atractivo y realizado por expertos que bien puede perder algunos minutos, se encargó de destacar otras figuras rutilantes encargadas del festival.
Respecto del año que viene el Intendente Viotti anticipó para el FTR2025 un acontecimiento sin precedentes, del anuncio rescato tres términos: todos, juntos, nosotros.
Como cierre escuché y “vimos” un recital musical magnífico que lidió con el partido de fútbol y la sorpresa de algunos asistentes que evidentemente esperaban otra cosa, pero bueno alguien elige la comida y si te gusta...sino también.
Resulta claro que el imperio y control de algunos hacedores y actuantes están intactos a pesar de los cambios de gobierno y funcionarios que se suceden. Me parece advertir que el amiguismo es otro particular ingrediente que le da sabor a la construcción.
El año que viene voy a ver si con mis conocidos de siempre organizo un conversatorio sobre el inicio del monumento a San Martín en Rafaela y mi nacimiento y su repercusión en la arquitectura y trazado de la ciudad, en relación con la ruta al El Festival de Atenas y Epidauro. Con el contenido producido voy a montar un espectáculo escénico para volver a conversar sobre ello cuarenta y cinco años después.
¡SÍ RAFAELA! ¡VAMOS POR EL FTR2025!