09.43 En el marco de los festejos por el 212° Aniversario de la Revolución de Mayo, este miércoles, a las 9 de la mañana, se llevó a cabo el tradicional Tedeum, que tuvo lugar en la Catedral San Rafael y fue celebrada por el Padre Alejandro Mugna.
Entre otras autoridades municipales, estuvo presente el Intendente de nuestra ciudad, Arq. Luis Castellano, acompañado por su esposa; el Jefe de Gabinete, Marcelo Lombardo; y el secretario de Producción, Empleo e Innovación, Diego Peiretti. También asistió el senador provincial por el Departamento Castellanos, Alcides Calvo.
En la homilía, el Padre Mugna destacó que "Dios nos habla y nos pide un corazón atento. Nos habla por medio de su Palabra y vuelve a tocar nuestro corazón mediante el regalo de la Fé. Sin embargo, nos habla de muchas maneras, y no sólo a los creyentes, sino a toda persona de buena voluntad. A todo ser humano que busca la Verdad y trabaja por el bien común. El Dios de la vida nos habla de los acontecimientos de la historia, y de un modo especial en aquellos que, en medio de las dificultades, aparecen como signos de esperanza, porque vemos en ellos algo verdaderamente transformador".
En cuanto a la pobreza que afecta a tantas personas, expresó que "cuánta solidaridad, cuánto esfuerzo y cuánta ilusión. En los sectores más vulnerables de nuestra sociedad, aparecen proyectos e iniciativas heroicas, gran parte de ellas protagonizadas por mujeres, que no se resignan a que se postergue el desarrollo integral de sus hijos. Por eso se agrupan, superan diferencias, y abren con esfuerzos nuevos caminos".
"En medio de un mundo marcado por los conflictos, surgen verdaderos espacios de Comunión entre creyentes, de distintas confesiones religiosas, y también junto a no creyentes que procuran desde la escucha y el acompañamiento salvaguardar la vida humana desde su inicio hasta el final. En ocasiones, solidariamente unidos, luchan, crean conciencia y se enfrentan al complejo mundo de las adicciones, para ocuparse del hermano concreto que necesita ayuda, y para encarar acciones, en gran parte, heroicas, porque no se dejan vencer por una cultura de la muerte", afirmó el Padre Mugna.
Además, llamó a los presentes a no ser oyentes distraídos sino, de verdad, constructores de una sociedad nueva.
"Pidamos a Dios en esta mañana que impregne de sabiduría, de compromiso y de justicia la vida de nuestro país, que conceda a los gobernantes una renovada conciencia de servicio, de compromiso por la verdad y de sacrificio auténtico por el bien común. Pidamos, también, para que todos los ciudadanos, cada uno desde nuestro lugar, seamos capaces de superar conflictos y diferencias, de vencer el egoismo y consolidar lazos auténticos de fraternidad", concluyó el Padre.
Fotos: D. Camusso.