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Se celebra hoy el Día de la Enfermería


Al conmemorarse el "Año Internacional de la Enfermería", compartimos un poco de historia sobre esta importante profesión, los desafíos actuales y las líneas de acción que está llevando adelante la Secretaría de Políticas Universitarias para fortalecer esta carrera estratégica y prioritaria para nuestro país.
La Organización Mundial de la Salud proclamó al 2020 como el "Año Internacional de la Enfermería". Su celebración a nivel global fue el 12 de mayo, al cumplirse el bicentenario del nacimiento de la fundadora de la enfermería moderna, Florence Nightingale. Pero en Argentina lo festejamos el 21 de noviembre, al conmemorar la fundación de la Federación de Asociaciones de Profesionales Católicas de Enfermería en 1935.





De las guerras a la universidad





Al igual que otras disciplinas del campo de la Salud, la formación en Enfermería surgió fuera del espacio universitario. En sus comienzos tenía un carácter más bien benéfico y empírico, relacionado con la necesidad de contar con su aporte frente a guerras, plagas y catástrofes. Sin embargo, en la década del 40 se inició en América Latina un proceso de industrialización que demandó la atención médica para proteger la mano de obra, lo que llevó a su profesionalización.
En nuestro país, las primeras universidades en incluirla fueron la Universidad Nacional del Litoral, que en 1939 creó la Escuela de Nurses, y la Universidad Nacional de Tucumán, que en 1952 abrió la Escuela de Enfermería.
Hoy son 61 universidades, entre públicas y privadas, las que la dictan en nuestro país, siendo la séptima carrera más estudiada, con una matrícula de más de 85 mil estudiantes y un crecimiento anual del 6,5% en la cantidad de inscriptos.
"A partir de 2006 se implementaron políticas públicas que impactaron en dos aspectos: en el aumento del número de inscriptos y el 'rejuvenecimiento' del perfil de los estudiantes, ya que muchos de ellos finalizan el secundario e ingresan inmediatamente a esta carrera", explica Karina Espíndola, presidente de AEUERA, asociación que nuclea a 53 facultades y escuelas de Enfermería de universidades públicas y privadas de todo el país.
Un dato a destacar es que cerca del 80% de los estudiantes son mujeres, algo que es histórico en la Enfermería, que inició como un trabajo muy ligado a los cuidados. Sin embargo, su profesionalización no pudo revertir esta tendencia, ya que en los últimos años la matrícula femenina en nuestro país se mantuvo estable en ese porcentaje (por ej, en las estadísticas universitarias de 2018, las mujeres representan el 79,5% del total de estudiantes de esa carrera).





Desafíos de la Educación en Enfermería post pandemia





Sobre la situación actual, Espíndola comentó que uno de los primeros impactos fue que "muchos de los docentes también trabajan en centros de salud, por lo que se vieron al borde del agotamiento, pero no por eso descuidaron la responsabilidad para con sus estudiantes". Respecto a la formación, expresó que "la pandemia puso en evidencia la necesidad de repensar las prácticas, que tienen una fuerte impronta presencial. El desafío será equilibrar la incorporación de nuevas tecnologías sin descuidar la cercanía con las personas", dijo. Por último agregó que este contexto llevó a reflexionar sobre el perfil de los egresados: "Necesitamos contar con más profesionales con mayores niveles de formación, principalmente en cuidado humanizado. Esto implica el fortalecimiento de las carreras de grado, el desarrollo de los posgrados y la articulación entre pregrado-grado".





Acciones de la SPU para fortalecer las Enfermerías





Uno de los momentos claves para la profesionalización de esta carrera fue en 2013, cuando el Consejo de Universidades incluyó a la Licenciatura en Enfermería dentro del régimen del "artículo 43", lo que significó que se considere prioritaria y deba acreditarse ante la CONEAU.
En 2019, la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU) lanzó la convocatoria PROMENF dirigida a las carreras que atravesaron este proceso de acreditación, con el objetivo de fortalecer y mejorar los procesos de enseñanza y aprendizaje y elevar los índices de retención y rendimiento académico. A la fecha, se financiaron proyectos de 30 universidades públicas, llegando a 19 provincias e impactando a más de 46.800 estudiantes.
Este año, la SPU anunció nuevas líneas de acción que permitirán capacitar a docentes y gestores universitarios en formación centrada en los estudiantes, la práctica profesional y el enfoque por competencias, y adelantó una convocatoria de Fortalecimiento de la Biosimulación, que brindará a los estudiantes de Enfermería, junto a otras carreras, la oportunidad de realizar prácticas análogas a las que desarrollarán en su vida científica y/o profesional, a través del entrenamiento basado en modelos de simulación.
"Nuestro país necesita más enfermeros y enfermeras. Quedó demostrado en la actual pandemia, y por eso desde la Secretaría trabajamos en líneas de fortalecimiento de la Enfermería y la sanidad en general, para que más chicos la elijan y también para que los auxiliares o técnicos que ya la ejercen puedan continuar avanzando en su proceso formativo", comentó el secretario de Políticas Universitarias, Jaime Perczyk.





¿Por qué hay pocos licenciados en Enfermería en la Argentina?





En la Argentina, se registraron 35 enfermeros por cada 10.000 habitantes y solo 1,6 de cada 10 cuenta con un título de licenciatura, según reveló un informe elaborado por la Escuela de Enfermería de la Facultad de Ciencias Biomédicas de la Universidad Austral, basado en datos oficiales de 2019.
Según el Observatorio Federal de Recursos Humanos en Salud (OFERHUS), dependiente de la Dirección Nacional de Talento Humano y Conocimiento del Ministerio de Salud de la Nación, en 2019 el 51,9% del personal eran técnicos en Enfermería; el 31,9%, auxiliares y el 16,2%, licenciados.
En este marco, la provincia líder con el mayor porcentaje de licenciados es Neuquén, con un 26%. La sigue la ciudad de Buenos Aires, con un 25%. El puesto más bajo lo ocupa Santiago del Estero con 1,4%. Así lo sostiene el informe que se dio a conocer en el marco del Día Internacional de la Enfermería que se conmemora mañana.
El hecho de que la mayoría del personal no cuenta con la licenciatura correspondiente se debe, según la directora de la carrera de Enfermería de la Universidad Austral y autora del informe, Dolores Latugaye, a "una necesidad de tener profesionales en el sistema sanitario". Es decir, "en nuestro país, el título intermedio de enfermero, que es un primer nivel de formación, permite insertarse en el sistema sanitario y no se necesita necesariamente la carrera de grado completa para trabajar".
Por otro lado, la cifra de licenciados en Enfermería aumentó año a año desde 2013, según el informe de OFERHUS en base a los datos de la Red Federal de Registro de Profesionales de la Salud (REFEPS). Mientras que en 2013 había 19.729 y en 2016, 25.363; en 2019 se registró un total de 38.088.
Latugaye puntualizó: "Está demostrado que a mayores niveles académicos, mejores resultados para el paciente y la familia en particular, y para el sistema sanitario y el país en general. El desafío de la Argentina es buscar cómo hacemos para ir año a año no sólo aumentando el número de graduados, sino también el porcentaje de licenciados sobre la totalidad de profesionales de Enfermería".
Y añadió: "Debería ser una política pública que estos trabajadores que se desviven, sobre todo con la exigencia de la pandemia, tengan la carrera, el mayor nivel de formación para los profesionales. Si el ejercicio de esta profesión es reconocido como de riesgo por el Ministerio de Educación de la Nación [art. 43 de la ley 24.521], esto debería ir en paralelo con una formación mínima de la carrera de grado para ser consistentes entre la política educativa y la sanitaria".
Además, el informe señaló que, en consonancia con los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), actualmente existe un déficit mundial de 18 millones de trabajadores de la Salud, y que la Argentina ocupó el nivel más bajo de personal de Enfermería con título de grado (11% sobre el total de profesionales) entre los 27 países de América en 2017.
"Para saber la necesidad de profesionales que tiene un país, se debería hacer un análisis del sistema sanitario: cuántas instituciones de salud existen, con cuántas camas; un mapa completo para definir cuántos profesionales son necesarios en cada una de las áreas", destacó la autora.


día de la enfermería especiales

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