Los medicamentos sufrieron la semana pasada incrementos que rondan entre el 20% y 25% en las farmacias de Santa Fe, un porcentaje que se suma a los aumentos que ya se registran mensualmente en sintonía con la inflación. Así, en lo que va del año, las subas rondan entre el 80% al 100% y, si se realiza una comparación interanual, el porcentaje se eleva en algunos casos a cifras de entre el 160% al 200% más.
La situación afecta en particular a las personas que atraviesan enfermedades crónicas, ya que hay medicamentos que en menos de un año duplicaron su valor y es cada vez más complicado hacer frente al costo que estos demandan. A pesar de que el Gobierno cerró el viernes un acuerdo con los laboratorios nacionales para congelar los precios de los medicamentos por 90 días, persisten las dudas sobre lo que ocurrirá con la gran cantidad de fármacos importados.
Entre los productos que mayor demanda registran figuran los relacionados con patologías crónicas como la diabetes, psicotrópicos, la presión, enfermedades cardiovasculares, anticonceptivos, varices, próstata y tiroides.
Entre los productos que mayor demanda registran figuran los relacionados con patologías crónicas como la diabetes, psicotrópicos, la presión, enfermedades cardiovasculares, anticonceptivos, varices, próstata y tiroides.LEER MÁS ► Congelan los precios de los medicamentos hasta el 31 de octubre Desde la farmacia Zentner confirmaron que entre los productos que mayor demanda registran figuran los relacionados con patologías como la diabetes, psicotrópicos, la presión, enfermedades cardiovasculares, anticonceptivos, várices, próstata y tiroides. Los constantes aumentos generan preocupación por tratarse de medicamentos que se administran diariamente. "Hoy por suerte las obras sociales cubren una parte, pero preocupa que la gente que tiene una enfermedad crónica no pueda sostener su tratamiento o lo discontinúe", sostuvo Sebastián Zentner.
"Hoy por suerte las obras sociales cubren una parte, pero preocupa que la gente que tiene una enfermedad crónica no pueda sostener su tratamiento o lo discontinúe", sostuvo Sebastián Zentner. Uno de los ejemplos más claros es lo que sucede con los psicotrópicos como el clonazepam, el cual es uno de los más utilizados, y que en los últimos ocho meses pasó de costar $2200 a $4800. En los mostradores de las farmacias los clientes empiezan a preguntar por una opción más económica. “Estamos notando que a la gente le cuesta comprar el medicamento”, agregó el entrevistado. “Lo que es medicación crónica, las obras sociales autorizan entre un 70% y 100% dentro de un vademécum de medicamentos”, explicó Zentner. Entre los factores que más inciden en el constante incremento de los medicamentos se mencionan la inflación y el aumento del dólar, ya que las drogas y la maquinaria que se emplean en la producción de los remedios son importados. “Lo importante es que los pacientes sigan manteniendo el tratamiento, que hablen con su médico y opten por otro medicamento o marca alternativa”, sostuvo el farmacéutico. Desde el Colegio de Médicos manifestaron su preocupación por el costo y la financiación de distintos aspectos de la salud. "Uno de ellos es el costo de los medicamentos, los cuales buena parte no son de producción nacional y entonces se genera, razonablemente con esta situación económica de desborde, un incremento que a veces es difícil poder entender", destacó el doctor Carlos Alico, integrante del Colegio de Médicos. El contexto se agravó exponencialmente esta semana por las decisiones de las autoridades donde los productos que son de origen extranjero van a tener un incremento importante. "El impacto será directo sobre todos los más desprotegidos que son aquellos que tengan necesidades de enfermedades crónicas, pero también aquellos que requieran completar tratamientos de enfermedades agudas", sostuvo el doctor.
El costo y la financiación de la salud son aspectos que impactan directamente en los honorarios de los médicos.Esta situación preocupa a la entidad "desde hace un tiempo", ya que advierten que no hay ninguna decisión para generar un estudio profundo sobre la situación real de la salud de la población, tanto sea pública como privada. "Es lógico que todos estemos preocupados porque nosotros como institución o como protagonistas también somos usuarios de un sistema que nos resulta cada vez más caro, más incómodo, más difícil de poder acceder", agregó Alico. Los sectores más desprotegidos razonablemente son los que más problemas tienen. "Es lógico que nosotros intentemos solidarizarnos y buscar un camino o espacio como para que todos lleguen a tener acceso tanto a la atención como a los medicamentos", finalizó. Fuente: Aire Digital.