19.19 Desde Liga Rafaelina de Fútbol se solidarizaron luego de los diferentes hechos de vandalismo que sufrieron en las últimas semanas las entidades deportivas de nuestra ciudad. El comunicado oficial.
Los hechos de inseguridad son moneda corriente en la sociedad actual y los clubes afiliados a nuestra Liga Rafaelina de Fútbol no son la excepción. En estos últimos meses, nuevos robos afectaron a varios de ellos y es una realidad que viven los clubes a diario.
Las instituciones no sólo albergan a niños y jóvenes todos los días que juegan al fútbol, además realizan un trabajo de contención importante donde los directivos deben, con la cuota mensual de sus socios, mantener las instalaciones.
En la reunión del Honorable Consejo Directivo de esta Liga, desarrollada el pasado martes 18/08, los dirigentes de las instituciones manifestaron que se sienten desbastados ya que se viene de prácticamente un año y medio sin actividad aprovechando para realizar construcciones y mejoras en las instalaciones, donde hubo tanto esfuerzo para que en poco tiempo te lo roben y se desvanezca tanto sacrificio.
Los robos y actos de vandalismo en clubes de la región siguen sumando capítulos y ahondando la preocupación, por cuanto se trata, en su enorme mayoría, de instituciones comunitarias que solventan sus gastos con enorme esfuerzo. Lamentamos que no se puedan prevenir, se ven ayudados por la gran oscuridad que tenemos a la noche y por la impunidad con la que se manejan.
La gente de los clubes reclama el mayor de los esfuerzos de parte de toda la sociedad, dirigentes comunales, dirigentes vecinales, autoridades políticas, agentes de seguridad y la comunidad misma, para que entre todos podamos frenar esta ola de delincuencia que afecta a las instituciones. Para las personas que realizan estos desmanes, si es cuestión de necesidad, desde las instituciones estamos dispuestos a ser solidario con las personas que lo necesiten, si es cuestión de delincuencia, repudiamos estos hechos que nos desalientan y entristecen a todos los que dedican su tiempo para el mantenimiento y buen funcionamiento de las instituciones.