El pasado viernes 26 de agosto tuvo lugar uno de los actos más emblemáticos y trascendentes de la historia de nuestra ciudad donde se puso en marcha el acueducto que conecta Desvío Arijón-Rafaela, obra que ha entregado un cambio sustancial en lo que es la prestación de servicios, con una mejora realmente notable. Imagínense que la ciudad ya ha transitado sus primeros calores y hasta el momento ningún vecino ha alzado la voz debido a algún inconveniente, con lo cual todo hace prever que por primera vez en largos años, la ciudad no tendrá que preocuparse por la falta de suministro o la baja presión constante en épocas de mucho calor.
Desde Diario CASTELLANOS fuimos directamente a la fuente y dialogamos con Luis Ambort, gerente local de ASSA, quien brindó detalles de cómo ha sido la evolución de las diferentes evaluaciones y balances que han realizado sobre la prestación del servicio desde que el acueducto se encuentra operativo. Según confirmó a este medio el propio funcionario local, Rafaela ha saldado la falta de suministro de agua potable gracias a la llegada de esta obra.
En definitiva, Ambort señaló que "por el momento es un tema que está saldado, que está resuelto", aunque esto no quita que en determinadas oportunidades lleguen a ASSA reclamos, pero que en definitiva terminan siendo casos puntuales, por problemas en alguna conexión, el robo de medidores u otro aspecto, pero que es categórico en reiterar que los mismos no se producen por falta en la presión de agua.
En esta misma línea, Ambort admitió que el sistema de ASSA cuenta con una red de sensores que miden la presión en 25 puntos de la ciudad y que eso mismo se va reportando de forma online, con lo cual el seguimiento y monitoreo es constante. "Por ahora no tenemos ese tipo de inconveniente. Si lo que está apareciendo, y que por ahí es otro tema, pero vinculado a lo que es el agua, estamos teniendo muchos robos de micromedidores. Eso lógicamente, que afecta, porque vos te levantas una mañana y te encontrás que no tenes el servicio de agua, o lo que es peor aún, que estuvo toda la noche perdiendo y derrochándose agua".
Además de este aspecto, Ambort admitió que todo esto también le genera un costo extra en la atención del reclamo, la reposición del medidor, el pago de la boleta del servicio y sobre todo la parte administrativa que se debe encarar para que dicho elemento sea repuesto.
Control de presión y suministro en la ciudad
Uno de los puntos que generaba expectativas y grande incógnitas era saber cómo iba a terminar respondiendo toda la red domiciliaria dado que las instalaciones de la misma en determinados sectores son realmente antiguas. Todo esto implicó un constante monitoreo de estos sensores de presión de las cañerías de nuestra ciudad.
"Nosotros, desde la empresa, lo que tratamos es que esa mejora sea progresiva, ya sea en el aumento de las prestaciones, el aumento de las presiones, que todo se vaya realizando en forma paulatina para ver también cómo respondían y cómo responden lo que son las redes distribuidoras domiciliarias. Con respecto a eso, los primeros 20 o 30 días, (después de la inauguración) hemos detectado un incremento de pérdidas, pero que con el paso del tiempo se fueron normalizando en lo que respecta a la detección de fugas, pérdidas y demás", señaló Ambort.
Obviamente que el funcionario no pudo ocultar la algarabía por este presente y reconoció que "ahora muy contento con cómo está funcionando, lógicamente que es una infraestructura que es nueva y puede tener inconvenientes, puede tenerlos o no, ojalá que no. Pero bueno, por ahora muy contento", admitió el responsable del servicio de agua potable de nuestra ciudad, que después de tanto haber sufrido las críticas por un sistema deficiente, hoy puede decir que las cosas han comenzado a marchar sobre rieles.
Respecto al tema de las pérdidas de agua que se registraron en los primeros días de funcionamiento, desde CASTELLANOS consultamos si era lo que realmente se esperaba y el responsable de ASSA fue claro y totalmente sincero al admitir que no contaban con certezas concretas de cómo podía llegar a responder el servicio. "No teníamos certeza de cómo se podía comportar, sí sabíamos los rangos de presiones que estábamos trabajando y dónde íbamos a estar proyectando. Pero fueron realmente parámetros no teníamos", con lo cual todo implicó la puesta en marcha del famoso sistema "prueba y error", pero que afortunadamente "se han comportado bien".
En definitiva el gerente de la empresa provincial sostuvo que a diferencia de cómo se trabajaba anteriormente con el sistema de ósmosis inversa, con el acueducto ellos pueden sostener constantemente la presión en todos los sectores de la ciudad, aspecto que anteriormente debido a la falta de suministro o de baja presión impedía que el funcionamiento sea parejo. "Antes parábamos la presión entre un máximo y un mínimo, y esto por ahí también hacía que se comporte distinta la tubería. Pero no, está todo dentro de lo previsible, no tuvimos mayor inconveniente", sostuvo.
Centro de distribución en Bº Los Álamos
Si bien toda la charla estuvo guiada por el funcionamiento del acueducto, hay otras obras que se están encarando en la ciudad para llevar el suministro a todas las casas de Rafaela y sobre todo atender a un futuro problema que pueda llegar a tener el sector oeste con falta de presión. Por eso mismo es que en el sector suroeste se está construyendo un centro de distribución que toma parte del caudal de agua que llega a Rafaela, siendo este un punto de rebombeo hacia todo el sector oeste y en el futuro para todo el norte de la ciudad.
El propio gerente de ASSA admitió que actualmente todo lo que responde a la parte de construcción de las cisternas de hormigón se encuentran finalizadas, que solo restan los trabajos de impermeabilización y revestimiento para completar esta etapa, pero que posteriormente quedará toda la instalación de bombas y el sistema de automatismo de este centro. "Así que en realidad los tiempos se han alargado un poco más de lo previsto, pero se está trabajando en ese lugar".
Entre otras cosas lo que dificultó su progresión fueron los esquemas de costos que van variando día a día, como así también conseguir los equipamientos como pueden ser bombas o sistemas eléctricos, "donde hay proveedores que no están vendiendo, o bueno, depende de las condiciones y demás, pero eso lógicamente que es como todo el mundo, la situación actual nos afecta", sentenció.