Con numerosa concurrencia, se presentó en el Congreso una iniciativa para restringir el aborto a partir de detectarse el latido del corazón.
Una numerosa concurrencia acompañó la presentación en dependencias del Congreso de un proyecto de «ley del latido», que restringe el aborto a partir de detectarse el latido del corazón.
Unas 200 personas colmaron una gran sala del anexo de la Cámara de Diputados, en un acto que encabezó el diputado nacional Alberto Asseff, firmante de la iniciativa, y hubo quienes no pudieron entrar.
Asseff (Unir-JxC, provincia de Buenos Aires) afirmó que no se puede interrumpir el derecho a la vida de quien está en el seno materno: «Es el propio hijo, es otra vida».
En la presentación, Raúl Magnasco, de la Fundación Más Vida, dijo que es el comienzo de un largo camino: observó que en los Estados Unidos ya hubo unos 200 proyectos de ley nacionales y estaduales para restringir el aborto provocado introducido por un fallo judicial en 1973. Comentó que Texas, el segundo Estado más poblado de ese país, con casi 30 millones de habitantes, aprobó una ley de latido, por la cual en 210 días se han evitado 30.000 abortos.
No se trata de que se acepte el aborto en los primeros días, aclaró, pero como pasan unas semanas hasta que la mujer advierte su embarazo, y se oye el latido, en la práctica esa ley termina siendo una abolición.
Asseff recordó que Aristóteles decía que el Estado es la organización de las familias, y subrayó que el ser humano es social y familiar. Expresó que en el interior del país, alejándose un poco de la capital, hay mucho más valoración de esa realidad. «El bebé que nace es una bendición, una alegría en todos los hogares, desde los más humildes a los más encumbrados».
Hubo varias preguntas e intervenciones de los asistentes. Una mujer dijo: «Queremos llegar a que no muera ningún niño, se escuche o no el latido».
En los fundamentos, el proyecto argumenta que «no cabe duda de que la Argentina necesita avanzar en una legislación que apunte a generar mayores garantías respecto de la viabilidad y preservación de la salud tanto de la madre como del feto o niño en gestación».
En su artículo 2°, el proyecto dice: «Los médicos, personal de salud o sistemas de salud no podrán realizar o inducir intencionalmente un aborto o interrupción del embarazo si se detecta un latido cardíaco del niño en gestación, entendiendo ello como actividad cardíaca o contracción rítmica constante y repetitiva del corazón dentro del saco gestacional».
Fueron cofirmantes de este proyecto los diputados Pablo Torello, Laura Carolina Catets, Jorge Enríquez, Lidia Inés Ascárate, Héctor Stefani, Soher El Sukaria, Francisco Sánchez, Virginia Cornejo y Julio Sahad. En el acto estuvo presente la senadora nacional por Santa Cruz María Belén Tapia.