Una pareja oriunda de la provincia de La Pampa sufrió un fuerte asalto durante la noche del sábado cuando circulaba por la autopista Rosario-Santa Fe, a la altura de la ciudad de Santo Tomé. Según versiones policiales, la secuencia se dio minutos antes de la medianoche cuando un hombre y una mujer, ambos con domicilio en la ciudad pampeana de Santa Rosa, circulaban a bordo de un Chevrolet Spin gris. Al llegar al kilómetro 144, mano a Rosario, se toparon con una cubierta que se encontraba en la ruta la cual quedó debajo del coche y obligó al conductor a estacionar sobre la banquina. Tras estacionar el vehículo, salieron de las inmediaciones del lugar dos hombres armados que se llevaron las pertenencias de la pareja y además uno golpeó al conductor del vehículo, el cual más debió recibir asistencia médica.
Un hecho recurrente
El reciente robo tuvo similares características al que le tocó vivir en febrero de este año a una fiscal del Ministerio Público de la Acusación, la cual vivió un dramático asalto junto con sus hijas y esposo. Aquel hecho ocurrió el 25 de febrero cuando, pasadas las 2.30, un Citroën C4 blanco, en el que iba una mujer embarazada y su pareja, chocó contra una piedra y reventó una cubierta y parte del tren delantero por lo que su conductor tuvo que frenar a la altura del obrador, cerca de un destacamento de la Policía de Seguridad Vial. La pareja llamó al 911, pero la policía nunca llegó al lugar. Unos minutos pasó por el lugar la fiscal de Santa Fe, Laura Urquiza, junto con su familia, y al ver el desamparo en el que se encontraban los ocupantes del C4 detuvo su marcha y asistió a la pareja. En medio de la situación, tres hombres salieron de atrás de un guardarail y con armas de fuego redujeron a las dos familias para sustraerle sus pertenencias. Inclusive, fueron tan violentos que hasta le apuntaron a unas nenas que se encontraban en uno de los vehículos y apuñalaron por la espalda a uno de los hombres que cambiaba la cubierta. Tras el asalto, los delincuentes huyeron del lugar y las dos familias se subieron como pudieron al auto en el que iba la fiscal Urquiza para dirigirse hacia la Comisaría Sexta para denunciar el suceso.