17.27 Esta práctica contribuye con el cuidado del ambiente y permite minimizar lo que se entierra en las celdas de relleno.
En el marco del mes del compostaje, que se celebra en Argentina desde el 22 de marzo al 22 de abril, el Instituto para el Desarrollo Sustentable continúa fomentando el compromiso ciudadano e institucional, para compostar los residuos biodegradables, a partir de diversas iniciativas.
El compostaje es un proceso de transformación natural de los residuos orgánicos mediante un proceso biológico, que los convierte en abono rico en nutrientes y sirve para fertilizar la tierra.
En Rafaela, la mayor parte de los residuos que se generan a diario en los hogares contienen un 50 por ciento de materia orgánica, que puede ser reutilizada para retornar a la tierra y así favorecer los cultivos y las plantas en general.
Además, es un aporte que tiene resultados inmediatos en la gestión integral de residuos de nuestra ciudad: si los residuos biodegradables que generamos en nuestros hogares se compostan, reducimos la cantidad que llega a la celda de relleno alargando su vida útil. Por eso esta práctica se vuelve tan importante.
La Secretaria de Ambiente y Movilidad, María Paz Caruso, contó en relación al tema que “hay un trabajo que venimos realizando en la ciudad sobre esta práctica ambiental, vinculados a decisiones y políticas públicas concretas que acompañan las iniciativas, como son los talleres de huerta y compost, la concientización ciudadana y el trabajo articulado con las instituciones de la ciudad en relación a la separación y reducción de residuos que llegan al Complejo Ambiental. También, la Red de Compostaje Domiciliario, las composteras comunitarias y cada uno de los espacios de capacitación y formación que compartimos con la comunidad sobre la temática”.
Iniciativas de participación
Además, se incorporó la práctica en las empresas, en el marco del trabajo articulado con las organizaciones que forman parte del Programa Instituciones Sustentables. Se entregaron dispositivos al predio del Sindicato de Empleados y Obreros Municipales (SEOM), al Supermercado Pingüino N°8 y Club 9 de Julio, para la elaboración de compostaje comunitario.
Esta acción suma el compromiso de las instituciones con el cuidado del ambiente y la correcta disposición de los residuos. También permite que vecinos, vecinas y miembros de la instituciones puedan acercar sus residuos orgánicos.
Asimismo, se entregaron dispositivos más pequeños para el compostaje interno, en numerosas empresas que adhirieron a la práctica.
Por otra parte, se instaló una compostera comunitaria en el bosquecito Norberto Besaccia, en el marco de un convenio marco con el Grupo Scout “Nuestra Señora de la Esperanza” que contempla el uso del Bosque Educativo “Norberto Besaccia” para actividades de conservación y cuidado de la naturaleza.
La compostera en el bosquecito es una oportunidad para visibilizar, concientizar y educar sobre el proceso de compost para que quienes lo vean puedan replicarlo en sus hogares.
Las Promotoras Ambientales, concientizan casa por casa sobre esta práctica para sumar compromiso ciudadano en los hogares. Pero además se sumarán nuevamente al recorrido del REA con una compostera comunitaria. La iniciativa busca que las personas del sector traigan sus residuos orgánicos para hacer compostaje comunitario y conocer cómo es el proceso para replicarlo y poner en valor los residuos que se generan en el hogar.
En años anteriores, en estos espacios, numerosas personas se mostraron interesadas y se llevaron material informativo, para iniciar la práctica en el hogar.
Finalmente, la ciudad cuenta con la Planta de Chipeado y Compostaje, que surge por la necesidad de valorizar los residuos verdes que ingresan al Complejo Ambiental, por un lado para reducir el volumen que estos ocupan y por otro lado para transformarlos en un material nuevamente utilizable.
Actualmente este espacio se está instalando en un nuevo sector en el Complejo Ambiental. El promedio de generación de residuos verdes en nuestra ciudad es de 1000 toneladas/mes, lo cual representa el 15 por ciento del total ingresado al relleno sanitario. Un 70 por ciento de estos residuos verdes proviene del servicio público (recolección de patio y Estación clasificadora de residuos), y un 30 por ciento de particulares y empresas.