En el Aero Club de nuestra ciudad, Melchor, Gaspar y Baltazar interactuaron con los rafaelinos presentes, en el Día de Reyes, haciendo olvidar por un ratito, el daño y la amargura que provoca la pandemia del Covid-19.
Por un rato nos olvidamos de la pandemia. Por un instante, volvimos a sonreír mirando a nuestros niños, que con sus ilusiones, vieron como los Reyes Magos desembarcaban otra vez en Rafaela, en su día.
Claro que el barbijo y los saludos "a puñitos" nos hicieron recordar permanentemente que aún debemos ser cautelosos con los protocolos y no relajarnos. Pero ese instante, fue considerado una especie de suspiro, de alivio, al olvidarnos por un rato de todo y venerar esta esta fiesta tradicional en la ciudad.
Anoche, y en las instalaciones del Aeródromo local, desde el Municipio y a través del área de Protección Civil, hubo un marco controlado de personas para recibir la visita de los reyes, donde cada niño fue con dos familiares más, restringiendo de esta manera mucho el aforo que en su momento estaba previsto. Todos estuvieron con el uso obligatorio de barbijo correctamente colocado y cumpliendo los protocolos vigentes.
De esta manera, Melchor, Gaspar y Baltazar llegaron a Rafaela una vez más, como hace 41 años, bajo el concepto "Regale un juguete y una emoción inolvidable", que atrae a tantas familias rafaelinas.
"Hace exactamente 41 años que estamos repitiendo esto y esta noche también lo pudimos hacer, más allá de cómo está la situación epidemiológica de la ciudad. Lo que hicimos el año pasado (la primera vez que se realizó en el marco de la pandemia), nos sirvió mucho para aprender: restringimos la cantidad de bonos para vender, hay muchos metros cuadrados para extender los lugares de entrega. Fue una organización tranquila, con menos gente, pero bueno, en esta ocasión sólo el chico pudo estar con dos mayores", explicó Gabriel Rivarossa, quien estuvo cargo de la coordinación de la actividad en el Aero Club.
Un momento fantástico
El show se va acoplando año a año y es cada vez más fascinante. Los reyes llegan en un avión, haciendo un vuelo rasante y rodeando las instalaciones del Aero. Esto genera una ansiedad tremenda en los más chicos, que levantan las manos, los saludas y esperan con ansias el aterrizaje, que no deja de ser emotivo. En este caso también, hubo un "valor agregado", que fue el nuevo avión que tiene el Aeródromo local, por lo que el espectáculo fue aún más lindo. "Por más que estamos más viejos, sigue siendo una emoción inolvidable. Esas tres estrellitas que se prenden en la noche y se van acercando, generan un valor mucho más importante que el juguete en sí mismo", destacó el coordinador.
Vale destacar que los reyes magos llegaron en tres aviones, donde bajaron también algunos colaboradores (disfrazados también de Reyes) para evitar que haya aglomeramientos. En tanto, también hubo un espacio para el Rey Mago, que emocionó a todos.
Por su parte, se prepararon una gran cantidad de bonos gratis para chicos que no tienen la posibilidad de comprar este momento. Entre el Municipio y la institución, entregaron en la semana muchos tickets para que también se acercaran y pudieran estar en ese momento.
Rafaela brindó otra noche única, siendo quizá, la única ciudad que realiza semejante evento y que convoca a tantas familias para celebrar este día especial.
Historia
Los magos eran una casta sacerdotal de Persia que se dedicaban al estudio de diferentes disciplinas. Orígenes, un escritor y teólogo del siglo III, fue uno de los principales impulsores de la teoría de que fueron tres magos los que ofrecieron los dones al niño: oro, incienso y mirra.
En el Evangelio de Mateo aparece recogido el siguiente texto: "Nacido Jesús en Belén de Judea, en tiempo del rey Herodes, unos magos que venían del Oriente se presentaron en Jerusalén, diciendo: ¿Dónde está el Rey de los judíos que ha nacido? Pues vimos su estrella en el Oriente y hemos venido a adorarle".
En las pinturas de las catacumbas de Santa Priscila del siglo II, los magos aparecían representados como nombres persas. No fue hasta el siglo VIII cuando comenzaron a ser presentados como reyes. Fue entonces cuando recibieron los nombres de Melchior, Gathaspa y Bithisarea. En la Edad Media, comenzaron a ser venerados como santos.
Melchor es un anciano blanco con barba, que representa a las personas originarias de Europa. Ofrece oro al niño por la realeza de Cristo. Por su parte, Gaspar rinde homenaje a los asiáticos y dona incienso por la divinidad de Jesús. Y, por último, Baltazar, en representación de África. Regala mirra, símbolo de la humanidad del Señor.