19.05 La Canasta Básica Total (CBT), que mide la línea de pobreza, se disparó un 7% en marzo y acumuló 47,3% en 12 meses. La alimentaria trepó 6,5% en el mes y 55,2% en un año.
Una familia tipo necesitó $89.690,37 durante el mes de marzo para no ser pobre. Así lo reflejó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) en su informe mensual que estimó en esa cifra el valor de la Canasta Básica Total (CBT) para un hogar de dos adultos y dos niños (6 y 8 años).
De esta manera, el valor de la CBT registró el mes pasado un salto del +7% frente a febrero, según el organismo nacional que conduce Marco Lavagna.
En tanto, la misma familia, necesitó $39.862,39 para cubrir el costo de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) durante el tercer mes del año. Este indicador, que se utiliza para medir la línea de indigencia, tuvo un aumento del +6,5% respecto a febrero, un poco menos que la inflación del período que fue del +6,7%.
De esta forma, en el primer trimestre, la Canasta Total (que mide línea de pobreza) incrementó su costo en un 17,8% y la alimentaria subió 20,9%, mientras que el alza del Índice de Precios al Consumidor (IPC) llegó al 16,1% en ese período.
Los datos corresponden a la valoración mensual que realiza el organismo nacional de estadísticas de la Canasta Básica Total (CBT), que reúne los bienes y servicios básicos para una familia tipo de cuatro miembros, formada por dos adultos y dos menores, y la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que reúne las necesidades kilocalóricas y proteicas imprescindible para una familia.
Ambas canastas (la Básica Total, que marca la línea de pobreza, y la Alimentaria, que marca la línea de indigencia) se habían dejado de publicar por el Indec durante la gestión de Cristina Fernández, recién en el abril del 2016 se retomaron estos indicadores de condiciones de vida que mide la valorización mensual de la canasta básica total y alimentaria en el Gran Buenos Aires.
Según los últimos datos oficiales, la pobreza en la Argentina retrocedió al 37,3% a fines del 2021, una situación que afecta a más de 17 millones de personas, confirmando que la pandemia del coronavirus no hizo otra cosa, que agravar aún más, la delicada situación social que atraviesa el país.
Además, el nivel de indigencia (que no alcanza a cubrir sus necesidades básicas alimenticias) afecta al 8,2% de la población, indicó el organismo estatal.
Durante el año pasado, el aglomerado “Gran Santa Fe” pasó de ser una de las regiones con mayores niveles de pobreza e indigencia del país, dónde uno de cada dos habitantes se encontraba por debajo de la línea que mide el Indec, a volver a estar en línea con el promedio nacional. (Aire de Santa Fe)