La Comisión Europea aprovechará la cumbre de la próxima semana para empujar a los gobiernos a estar listos ante esa eventualidad.
Rusia puede cortar el suministro de gas a Europa en cualquier momento, cree la Comisión Europea, que aprovechará la cumbre europea extraordinaria de la próxima semana para empujar a los gobiernos a prepararse ante esa eventualidad. Moscú ya cerró los grifos a Bulgaria, Finlandia y Polonia.
El documento de conclusiones de la cumbre, que Clarín pudo consultar este martes y que todavía pueden cambiar hasta que finalice la misma, asegura que el bloque necesita a corto plazo un plan de coordinado de contingencia para hacer frente a ese corte del suministro.
Cuando estalló la guerra alrededor del 40% del gas que importaban los 27 países de la Unión Europea era de origen ruso. Esa tasa se ha reducido pero sigue siendo más de un tercio. La dependencia de Rusia es muy diversa. Para países como Chequia, Hungría o Eslovaquia el gas ruso es el 100% del gas que importan. Para otros, como Irlanda, Portugal o España, es anecdótico.
La cumbre también prometerá que los gobiernos europeos se ayudarán unos a otros si Rusia corta el gas, enviando gas a los más necesitados y rellenando lo máximo posible sus reservas, al menos hasta el 85% antes del próximo 1 de noviembre.
Las reservas
El texto dice: "Los preparativos para posibles disrupciones mayores de los suministros y para hacer más resistente el mercado europeo del gas deben acelerarse, en particular con acuerdos bilaterales de solidaridad y con un plan de contingencia europeo".
La promesa de aumentar las reservas hasta tenerlas al menos por el 85%, que se acordó también con el Parlamento Europeo, será otro de los grandes puntos de esta cumbre. Si en principio se convocó para aprobar definitivamente el embargo al petróleo ruso, la negativa de la Hungría del nacionalista Viktor Orban hace que los europeos no puedan aprobar esa sanción.
A cambio los gobiernos van anunciando reducciones de compras de petróleo ruso.
Los tres países que vieron cómo Rusia les cortaba el suministro de gas cuando había que renovar contratos fueron Bulgaria, Finlandia y Polonia porque se negaron a pagar el gas en rublos, como exige el Kremlin. La Comisión Europea asegura que cambiar unilateralmente los contratos es ilegal y advierte a los gobiernos que sí aceptan que sus compañías paguen en rublos a Moscú estarán violando las sanciones.
La cumbre también prometerá que Europa diversificará sus proveedores de hidrocarburos. Italia consiguió la promesa argelina de aumentar los envíos de gas, ministros alemanes viajaron a Qatar y el emir catarí visitó la semana pasada España con los suministros de gas en lo más alto de su agenda.
España es clave en la diversificación de proveedores porque tiene un tercio de las regasificadoras europeas, herramientas indispensables para importar gas licuado en buques metaneros.
Energías renovables
La Comisión Europea también puso ya en marcha una plataforma de compras conjuntas de gas licuado para intentar contener los precios. La idea es que las compras de gas que se hagan estos meses sin frío y que sirvan para rellenar las reservas sean más baratas.
Se permitirá que participen en esta plataforma países como los de los Balcanes o algunos al este de la Unión Europea como Georgia o Moldavia.
La cumbre también hará referencia al plan RePowerEU de la Comisión Europea que busca acelerar la implantación de energías renovables como una de las mejores formas de reducir la dependencia de Rusia.
Bruselas hizo público la semana pasada un plan de más de 200.000 millones de euros para esa aceleración, para aumentar la eficiencia energética y para mejorar las infraestructuras energéticas dentro del continente y así facilitar los intercambios entre los países de la Unión Europea.