Cada 7 de septiembre se celebra en Argentina el Día del Trabajador Metalúrgico en homenaje a Fray Luis Beltrán, un religioso argentino que nació, en Mendoza, un día como hoy en el año 1784. Pese a sus actividades como fraile, Beltrán quedó inmortalizado en la historia nacional por ser uno de los impulsores del trabajo con metales.
A lo largo de la segunda década del siglo XIX, al explotar las guerras por la Independencia en lo que antiguamente era el Virreinato del Río de la Plata, Fray Luis Beltrán combinó sus tareas religiosas con sus conocimientos de matemática y química, e incursionó en la actividad metalúrgica. Como trabajador del metal, jugó un rol muy importante como fabricante y organizador de la artillería del Ejército de Los Andes, liderado por el general José de San Martín.
Beltrán montó su taller en el campamento de Plumerillo (en la provincia de Mendoza), donde unos setecientos artesanos y operarios -a quienes el Fraile enseñaba el oficio- trabajaban por turnos. Aquí se fabricaban desde monturas y zapatos, hasta balas de cañón, fusiles, vehículos de transporte y granadas, artículos que se producían con metales obtenidos de la fundición de campanas de iglesia y ollas de cocina.
Pero el trabajo de Beltrán no sólo se quedó en la elaboración de piezas: también diseñó máquinas para optimizar el trabajo de los granaderos en las alturas de la Cordillera de los Andes. Así fue que ideó equipos especiales para transportar cañones a lomo de mula, aparejos para subir las laderas más escarpadas y puentes colgantes transportables para hombres y mulas.
El Fraile, apodado entre sus compañeros como el "vulcano con sotana" fue el impulsor de la metalurgia en Argentina. Por este motivo, cada 7 de septiembre se homenajea esta actividad que tanto aportó a la Independencia y al desarrollo del país.
Hay unos 70.000 trabajadores en el país
Se estima que las actividades metalúrgicas, sin incluir las siderurgias y las automotrices que están excluidas de este acuerdo, engloba a 70.000 trabajadores. No existe información sobre cuántos son los trabajadores sindicalizados y los que no están adheridos al sindicato.
En los fundamentos del acuerdo empresario-sindical se señala "que actualmente muchas empresas y trabajadores no participan ni sostienen a sus entidades representativas, limitándose a criticar, generando una competitividad desleal con sus pares, compartiendo logros y beneficios de quienes con sus aportes, contribuciones y esfuerzo mantienen un sistema solidario".