El ministro de Economía defendió el impuesto a la renta inesperada y pidió a los empresarios "construir colectivamente". Lo hizo ante el denominado "círculo rojo" en el tradicional Foro Llao Llao.
El ministro de Economía, Martín Guzmán, advirtió este viernes que "cada vez que Argentina tuvo un período en el cual hubo un crecimiento económico que no se distribuyó de forma razonable, no se pudo sostener en el tiempo".
Guzmán habló en el Foro Llao Llao, el encuentro de empresarios que terminó ayer en Bariloche, en la que también hablaron previamente Mauricio Macri, Javier Milei y Horacio Rodríguez Larreta, entre otros.
"Tenemos que construir colectivamente una sociedad que sea más justa, que tenga una distribución donde el crecimiento se comparta al mismo tiempo en el que se alienta a la inversión", pidió el ministro, frente a los cerros nevados y el lago Nahuel Huapi, donde se dieron cita, como lo hacen una vez al año, casi un centenar de empresarios en un clima de secretismo e intimidad.
En su presentación con filminas, el ministro de Economía destacó la recuperación económica y la "fuerte" reducción del déficit fiscal. También ponderó el cierre de la negociación del FMI y aseguró que es "central" el crecimiento del sector de energía para invertir en infraestructura, en donde se avanza con la construcción del gasoducto Néstor Kirchner y espera mayor inversión privada.
Por su énfasis en la cuestión energética, en los pasillos del hotel le pusieron el mote de "ministro de Energía". Guzmán no mencionó la cuestión tarifas en su exposición, pero consultado su entorno al respecto reconocieron que el plan anunciado y acordado con el Fondo Monetario sigue en pie. "El 11 y 12 de mayo hay audiencias públicas, la decisión es avanzar con esto", dijeron sus colaboradores. Y reconocieron que para la aprobación final "se necesita la firma" del ENRE y el ENARGAS, controlados por Federico Basualdo y Federico Bernal. Ambos dirigentes, identificados con La Cámpora, se han resistido en los últimos años a subir las tarifas.
En ese marco, el invitado ratificó su proyecto para gravar la renta inesperada ante la necesidad "distribuir" el crecimiento económico. Pero una vez concluida la introducción del funcionario, empezaron a llover las inquietudes que preocupan a los hombres de negocios. "Es muy noble lo de redistribuir y eso de la justicia social, pero no tienen que subir los impuestos, el problema es la inflación, que afecta a los más pobres", disparó un empresario.
El jefe de Economía aseguró que la aceleración de los precios "es un problema para el funcionamiento de todo el sistema económico". También reconoció los límites para contenerla. "No es que la inflación se baja simplemente contrayendo la política monetaria, dejando de emitir", continuó. Y ante el pedido de "bajar fuerte los precios en dos años", apuntó contra las "recetas simplistas" al advertir que "generaría más inestabilidad".
El día previo, el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, les había prometido a los empresarios que atacaría los principales problemas de la economía "en cuatro días". Mauricio Macri, Carlos Melconian y Javier Milei también apuntaron contra la inflación. La discusión se dio cuando faltan pocas semanas para conocer la inflación de abril y el Gobierno espera una suba superior al 5%, después del dato del 6,7% en marzo, el mayor en 20 años.
Mientras en una de las alas del hotel se asaban a las brasas los corderos patagónicos para el goulash del mediodía, los dueños de las principales compañías también se mostraron preocupados por el escenario financiero. "Reestructuramos la deuda, eso estuvo bien, pero no bajamos el riesgo país", le plantearon desde los asientos. A lo que Guzmán respondió que "si bien no bajó del todo, estamos en esa senda" y reconoció que "la situación es difícil".
Guzmán viajó desde Neuquén a Bariloche en un vuelo no comercial y estuvo acompañado de la jefa de Gabinete, Melina Malamacce, su asesor Pablo Salinas, el subsecretario de Relaciones Institucionales, Rodrigo Ruete, el secretario de Política Tributaria, Roberto Arias, el director del Banco Central, Guillermo Hang, y el representante ante el FMI, Sergio Chodos, quien mantuvo reuniones aparte con miembros del foro.
"Fue muy valiente en venir el ministro de Economía", respondió uno de los organizadores del evento. "Respondió con mucha altura, muy bien, siente que tiene un plan", dijo otro de los asistentes a la salida de la charla. Desde la organización del evento confirmaron que también habían invitado a otros representantes del oficialismo, pero no aceptaron. Los nombres prefirieron mantenerlos en secreto.