11.12 Las declaraciones de los "tories" de su propio partido pidiéndole la dimisión, tras el caos parlamentario del miércoles pasado, aceleraron la decisión.
La primera ministra de Gran Bretaña, Liz Truss, anunció su renuncia al cargo, después de que los legisladores de su propio partido pidieran su dimisión, indignados por una votación parlamentaria caótica y la renuncia de su secretaria del Interior, Suella Braverman, a última hora de este miércoles.
“No puedo cumplir el mandato para el que me eligieron. He anunciado al rey mi decisión de dimitir”, afirmó Truss. La todavía primera ministra ha acordado con la dirección del Partido Conservador que seguirá en el puesto durante una semana, el tiempo que se han dado para buscar un sustituto.
La popularidad de la primera ministra británica cayó después del abandono de distintas medidas fiscales que buscaban recortes de impuesto masivo y el apoyo a las facturas energéticas. Además, la crisis se agudizó cuando se anunció la salida del ministro de Finanzas, Kwasi Kwarteng, que fue reemplazado por Jeremy Hunt.
Las políticas fiscales fueron suspendidas este lunes, después de que Truss anunciara al nuevo titular de la cartera económica en Reino Unido.
Mientras tanto, los asesores del gobierno ya mostraban preocupación por la posible renuncia de gran parte del gabinete de Truss: este jueves se conoció la renuncia de Suella Braverman, ministra del Interior, debido a un error administrativo relacionado a la crisis migratoria.
El fallido plan económico presentado por su gobierno el mes pasado desencadenó el caos financiero y una crisis política que derivó en la sustitución del secretario del Tesoro, múltiples cambios de rumbo en sus políticas y en una ruptura de la disciplina en el gobernante Partido Conservador. (La Capital)