Agentes del Servicio Penitenciario descubrieron un hueco que estaba siendo realizado por ocho presos del pabellón 14. Detectado el suceso, apartaron a todos los internos y los reubicaron en otro sector. Si no se hubiera advertido la maniobra, es probable que hubiese un intento de evasión masiva de reclusos.
(Fuente Uno Santa Fe) En las últimas horas, en la Unidad II cárcel de Las Flores, otra vez suboficiales del Servicio Penitenciario santafesino lograron frustrar las medidas preparatorias de lo que podría haber sido una fuga masiva de presos.
Un suboficial que escuchó ruidos repetitivos en un sector del pabellón 14, pidió apoyo y detectaron que los ocho presos que estaban en la parte superior, avanzaban en la ejecución de un boquete de un tamaño de 20 por 20 centímetros. Si los presos hubieran llegado al otro lado, que es el campo de deportes, les hubiese quedado libre un corredor ciego que llega al muro perimetral.
Un suboficial, entre varios que verificaban los muros interiores y exteriores del pabellón 14 de la cárcel de Las Flores, fue el que detectó con buen oído, golpes repetitivos e incesantes durante varios minutos en la planta alta del pabellón 14. Fue en ese momento que avisó la novedad y con refuerzos de otros penitenciarios realizaron una revisión y descubrieron que varios presos alojados en dicho sector, estuvieron realizando la rotura de mampostería con la evidente intención de agrandarlo y escapar.
Prueba de ésto es que ya había sido colocado un colchón arriba de un alambrado de púas, que evitara heridas en la fuga. Finalmente, todos y cada uno de los presos que fueron sorprendidos en la maniobra, fueron trasladados y alojados en otros pabellones. Después, albañiles y herreros del servicio penitenciario, repararon la totalidad de los daños e inclusive aseguraron el lugar con sunchos metálicos soldados.
Informaron sobre la intervención penitenciaria por segunda vez en una quincena. La vez anterior también fueron frustradas las expectativas de fuga en otro pabellón, cuyos presos fueron trasladados a la cárcel de Coronda. Las autoridades penitenciarias hicieron lo propio con la Subcomisaría 17° por razones de jurisdicción,. Junto al fiscal en turno del Ministerio Público de la Acusación, que ordenó la realización de un informe sobre la ocurrencia del procedimiento y la identidad de los ocho presos involucrados en este caso.