El 22 de mayo de 1810, cuando le tocó votar por la permanencia o destitución de Baltasar Hidalgo de Cisneros, Domingo French optó por echar al virrey, y agregó: "Yo y 600 más". Aludía así a la gente de las afueras que había movilizado y que lo seguían a fe ciega. Junto con Antonio Beruti compusieron una dupla que aún obliga a nombrarlos siempre juntos. Fieles a sus principios, ambos vivieron sus vidas muy intensamente.
Domingo María Cristóbal French y Urreaga nació en Buenos Aires, el 21 de noviembre de 1774. Por muchos años, fue el único cartero con el que contó la ciudad de Buenos Aires. Era el "entregador de pliegos y cartas". Le pagaban por carta entregada. Este trabajo le permitió conocer a cada uno de los vecinos. Desempeñaba su trabajo con mucha responsabilidad, al punto en que en una oportunidad fue elegido para llevar la (hoy millonaria) cifra de cien mil pesos a Montevideo, al no querer asumir tal responsabilidad el capitán de un barco.
En las invasiones inglesas, junto a Juan Martín de Pueyrredón organizó el cuerpo de húsares. Por su actuación frente a los británicos, primero fue nombrado teniente, en 1807 ayudante mayor y luego sargento mayor; Liniers, una vez como virrey, lo ascendió a teniente coronel de infantería. Finalmente, luego de los sucesos de Mayo de 1810, obtuvo el grado de coronel.
Antonio Luis Beruti nació en Buenos Aires el 2 de septiembre de 1772 y se doctoró en Derecho en la Universidad de Salamanca. Estuvo en las invasiones inglesas y fue uno de los partidarios de que Carlota Joaquina reinase en estas tierras, ya que su hermano Fernando VII estaba preso de Napoleón Bonaparte. La dinámica política de entonces lo encontró luego conspirando junto a los criollos.
French y Beruti fueron dos de los organizadores de una importante fuerza de choque de 500 jinetes, una fuerza considerable. En la jerga popular, eran "los chisperos", por los fusiles a chispa que usaban. También eran conocidos como "la legión infernal" y "los manolos".
Según las crónicas de la época, en los días previos al 25 de mayo recorrían la ciudad con antorchas "atemorizando a muchos y ganándose el odio de los partidarios del Virrey".
Sus opositores los denostaban. "Otra vez estos bandoleros", se quejaban. Aseguraban que a esta dupla le gustaba la vida nocturna, el vino, el juego de barajas y las mujeres.
Piquetes y cintas
Fue la gente movilizada por French y Beruti la que más presión hizo contra los cabildantes partidarios de Cisneros, la que más presionó en la plaza, hasta el punto que en algún momento hasta se propuso: "Matemos al Virrey".
En el día histórico del cabildo abierto del 22 de mayo -posiblemente inaugurando la modalidad del piquete- estuvieron en los accesos a la plaza para controlar quiénes pasaban o no a la sesión, burlándose y maltratando a los partidarios del Virrey. Fue uno de los motivos por los que muchos de ellos ni se les ocurrió concurrir al Cabildo abierto.
A French y Beruti, precursores de los punteros políticos, los manuales de historia los relacionan con las famosas cintas que repartían entre los adeptos a la renuncia del Virrey. Algunos historiadores del siglo XIX, como Bartolomé Mitre aseguran que eran celeste y blanca, y que fueron las únicas que habían conseguido en un negocio que las vendían; otros que eran solo blanca, color que simbolizaba la unión entre americanos y europeos y que llevaban sujeta una estampa con la imagen del rey Fernando VII.
El 25 de mayo, cuando aún se discutía la conformación de la junta de Gobierno, los seguidores de French y Beruti tenían la vista fija en el balcón del Cabildo. En el caso de que las gestiones salieran desfavorables para los criollos, Manuel Belgrano se asomaría al balcón y arrojaría un pañuelo, señal para irrumpir en el Cabildo.
Tomás Guido, de especial simpatía hacia los "chisperos", dejaría escrito años más tarde que había sido Antonio Beruti el que armó la lista de la que sería la Primera Junta, en un momento en que los criollos no lograban ponerse de acuerdo. De pronto, Beruti pidió papel y tintero, y de un impulso, escribió los nombres de lo que sería el primer Gobierno patrio.