12.01 El 2022 inició con algo largamente anhelado: el retorno a la presencialidad luego de dos años de virtualización de la educación con motivo de la pandemia.
Así se abrieron las puertas de esta quinta edición del Proyecto Interdisciplinario de Vinculación con el Medio Socio-Comunitario, expectantes del reencuentro y relanzamiento de la apuesta que supone; convencidas de que la propuesta constituye un aprendizaje significativo para los y las participantes.
En el 2021, aprendimos a mirarnos como comunidad, fuimos “hacia adentro”, nos pusimos en el centro para aprender y aprehendernos. Este año, procuramos profundizar ese trabajo dando un paso hacia la acción. Para ello, conformamos un equipo de estudiantes de 3 carreras dictadas en la sede: Lic. en Psicología, Lic. en Comunicación Social y Lic. en Nutrición.
Tomando como punto de partida el Cuestionario elaborado y ejecutado durante 2021, se avanzó en la creación de un dispositivo inédito, con los múltiples desafíos que eso supuso.
Luego de cuantiosos intercambios, sensaciones de incertidumbre, revisión permanente, autocrítica constante, construcción de consenso y el respeto por las diferentes opiniones, logramos el objetivo.
Partiendo de los hábitos consignados en el cuestionario del año anterior, y entendiendo a la salud desde una perspectiva integral, se avanzó en el relevamiento de 4 categorías: alimentación, tiempo libre / de ocio, actividad física y vínculos. La propuesta se llevó adelante mediante un dispositivo virtual no autoadministrable, que permitió hacer uso de la instancia de implementación para una práctica de promoción de salud: el diálogo y el intercambio con los y las participantes respecto de cada categoría.
Se complementó la administración del dispositivo con una devolución sobre el “promedio de salud” de cada persona respecto a las categorías elegidas y con la entrega mensajes y consejos vinculados a cada dimensión.
Los sitios en que se concretó la actividad fueron en la sede académica de UCES, el Club Atlético de Rafaela, el Club 9 de Julio y Flaming.
En total, se implementaron 288 encuestas. En términos generales, los promedios obtenidos fueron buenos (+4 puntos en una escala de 5), dando cuenta ello de una mayor concientización del público relevado respecto de los cuidados integrales.
La alimentación fue la categoría más consultada, esto se condice con cierto discurso social común que encuentra allí una de las maneras más habituales de autocuidado.
Le siguieron las categorías de actividad física (muchas veces asociadas a la anterior) y de tiempo libre. Esta última, constituía una novedad, especialmente en la valoración que se hacía respecto del tiempo disponible para el descanso no sólo físico, sino fundamentalmente mental.
En cuanto a la dimensión vínculos, fue la menos consultada y también, la que más interrogantes abrió. Instalar una reflexión respecto de la calidad de nuestros vínculos, sigue siendo una apuesta necesaria en pos de fortalecernos colectiva y singularmente.
Más allá de los promedios generales, nos interesa recuperar que la instancia de intercambio personal individual produjo experiencias significativas en las cuales las personas participantes respondían con sinceridad y de manera crítica a las preguntas. Esto propició diálogos en los cuales los y las respondientes enunciaban aspectos de su historia personal: dificultades propias con algunos temas, aspectos que están abordando con acompañamiento profesional, registro de la modificación de hábitos respecto de tiempos anteriores, consultas puntuales sobre ajustes posibles en algunas conductas. Así, la riqueza del instrumento no radica sólo en el resultado, sino en el proceso completo, que incluyó un posible asesoramiento puntual sobre lo dialogado.
Esto último, se constituyó en el ejercicio de un rol crucial en cualquier profesión: el de promotor de cuidados y salud, desde una perspectiva integral y comunitaria. Y es esa la enorme fortaleza que encontramos en la propuesta: que la Universidad pueda conocer e intervenir en temáticas sociales de interés, que estudiantes de distintas disciplinas ensayen y vivencien el trabajo en equipo (una habilidad tan importante en los actuales escenarios laborales), y que podamos seguir aportando algunos pasos en procesos de transformación colectiva, como es el caso de la salud.
Lic. Lorena Culasso y Lic. Silvana Moos.